Madero, Tam. - Artesanos y vendedores de frutas de la Escollera de Playa Miramar protestaron en las afueras de la alcaldía debido a que los reubicaron a un sitio en donde las ventas no les favorecen.
El pasado 17 de enero los vendedores fueron sacados por la Policía Estatal y la Guardia Nacional de la escollera, esto presuntamente por instrucción de la API de Tampico, sin embargo al paso del tiempo regresaron y este fin de semana los volvieron a reubicar. Julio César Escamilla, artesano de la Escollera, dijo que aún así, el municipio les cobra hasta 1,800 pesos de derecho de piso para sus ventas, señalando que apenas están surtiendo sus productos para comercializarlos en Semana Santa: “Ellos quieren privatizar igual que Altamira. Es una zona que siempre ha sido abierta”. Indicó que podrían cerrar el paso a la escollera a manera de protesta.
“Esto nunca se había hecho, es una turística que siempre ha estado abierta”.