Cd. Victoria, Tam.- El sistema penitenciario de Tamaulipas sigue sin cumplir con las garantías individuales de los reos, reveló la CNDH, al detectar autogobiernos, actividades ilícitas, hacinamiento, pésimos servicios de salud, violaciones de derechos humanos, así como condiciones de sanitarias y alimentarias que rayan en la marginación.
La última evaluación a los penales de Tamaulipas elaborado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2023, le dio una puntuación general de 6.03 a los penales de Matamoros, Reynosa, Nuevo Laredo, Victoria y Altamira.
Que si bien es la mejor calificación que se ha obtenido el sistema penitenciario estatal en los últimos 13 años, al rebasar el umbral de los 6 puntos, persisten las mismas deficiencias para salvaguardar la integridad de los reos.
La CNDH encontró en semáforo rojo las condiciones de gobernabilidad, y la reinserción social de las personas privadas de la libertas; y semáforo amarillo en los aspectos que garantizan la integridad de los reos; aspectos que garantizan una estancia digna, y grupos de personas privadas de la libertad con necesidades específicas.
Se encontraron condiciones de ingobernabilidad al detectar ejercicio de funciones de autoridad por parte de personas privadas de la libertad catalogado como autogobierno o cogobierno; actividades ilícitas, aislamiento, y falta de protocolos para evitar incidentes violentos, lo que detona un ambiente hostil al interior de los penales.
Esto se deriva en que en los cinco penales tienen deficiencias en personal de seguridad y custodia, a pesar que la población se encuentra muy por debajo de su límite. Cuenta con una población de 3 mil 995, cuando su límite es de 6 mil 158 reos.
Los problemas de inseguridad al interior de las cárceles estatales no son algo nuevo, ya que se vienen registrando incidentes violentos desde el 2006 que iniciaron las revisiones de la CNDH en los centros penitenciarios.
En una escala del 0 al 10, los penales peor evaluados fueron el de Matamoros con 4.59, y el de Reynosa con 4.80, por debajo de los cinco puntos; le siguen el de Nuevo Laredo con 6.44, el de Ciudad Victoria con 6.72 y el mejor evaluado fue el de Altamira con 7.58.
Lo anterior refleja que los centros penitenciarios de la frontera son los más inseguros para los reos mismos, además de ser las zonas de mayor conflicto entre grupos armados antagónicos, por la pelea de los territorios y los cruces fronterizos con Estados Unidos.
El sistema penitenciario de Tamaulipas se ubica en el lugar 19 a nivel país. El número 1 es Querétaro y el 32 Tabasco.