Al realizar un recorrido de supervisión por el "Puente de la Esperanza", una obra con una inversión estimada de 293 millones de pesos, el gobernador Américo Villarreal Anaya aseguró que en Tamaulipas se acabó la corrupción, la deshonestidad y "Estamos comenzando a vivir los cambios; en eso estamos y tengan la seguridad de que no les vamos a fallar", expresó.
"Queremos alejarnos de lo anterior, como fue este ejemplo, este símbolo que existía aquí de la deshonestidad, de la corrupción, el ´Puente Roto´, que estuvo aquí por más de tres administraciones sin que nadie le tocara ni le moviera nada. Ya había hasta árboles arriba del puente, era un monumento a la deshonestidad, a la corrupción, un puente roto", afirmó.
Junto a los alcaldes de Altamira, Armando Martínez; de Tampico, Jesús Nader y de Ciudad Madero, Adrián Oseguera, así como de legisladores federales y locales, el mandatario tamaulipeco destacó que el inicio de esta obra, que deberá estar terminada en un plazo de 259 días, es un gran ejemplo de lo que se puede lograr al trabajar de forma conjunta entre el Gobierno Federal, Gobierno del Estado y los gobiernos municipales.
"Tenemos muchas obras pendientes por hacer, que nos quiten estos monumentos a la ineficiencia, la corrupción, el dispendio, al enriquecimiento de unos cuántos por obras malas y mal planeadas, nada más con la intención de enriquecerse y por dar malos materiales y mala participación y preservación de nuestros recursos y que estamos ahora transformando", mencionó.
Tras el entusiasmo de cientos de altamirenses que se dieron cita para recibirlo con porras y pancartas de apoyo, Villarreal Anaya insistió en que vienen grandes obras para Tamaulipas que contribuirán al desarrollo y el bienestar social de las y los tamaulipecos.
Supervisa Américo Villarreal Anaya el inicio del "Puente de la Esperanza".