Para muchos trotamundos, la Navidad es la época más bonita del año: coloridas luces lo mismo decoran escaparates y fachadas que arbolitos; la gente suele protegerse del frío vistiendo varias capas de ropa y bebiendo un reconfortante café o vino caliente.
Por supuesto, hay destinos que también destacan por su mood navideño y, por ello, te presentamos algunos de ellos... desde la capital de una provincia canadiense y algunos rincones estadounidenses hasta un remoto punto del Círculo Polar Ártico. Todos se antojan ideales para ser visitados, en temporada navideña, alguna vez en la vida.
En la multicultural Toronto, capital de Ontario, tanto foodies como shopaholics se darán vuelo debido a que cuenta con un vasto catálogo de restaurantes y centros comerciales. Los amantes de la moda invernal podrán lucir sus prendas mientras se divierten en Nathan Phillips Square, el corazón donde se percibe con fuerza el palpitar de esta gran urbe.
En torno a la plaza destacan las brillantes decoraciones y los paseantes suelen combatir las bajas temperaturas con calóricos snacks y humeantes bebidas. Sin duda, una de las estrellas que más llaman la atención durante esta temporada es la pista de patinaje sobre hielo, en la que los asistentes ponen a prueba su equilibrio y se deslizan con toda la actitud.
Otra opción para contagiarse del espíritu navideño en esta ciudad se halla en Casa Loma, un castillo como de cuento, en el que se desarrolla "Christmas at the Castle", evento en el que hay un gran árbol navideño, instalaciones con coloridas luces, talleres de manualidades y música acorde a la temporada. De igual forma es posible tener un encuentro con Santa Clos.
Pero como Santa es un viajero empedernido y, además, omnipresente también es posible pedirle una foto y uno que otro regalo en otras partes del mundo, como en Estados Unidos.
Por ejemplo, en el territorio de Reno-Tahoe, en Nevada, Papá Noel suele practicar deportes de nieve y caminar por las calles iluminadas al tiempo que familias enteras patinan en las pistas al aire libre mientras los más friolentos aprovechan el tiempo para tomar un calórico chocolate con crema batida.
Conviene saber que la mañana del 24 de diciembre, Santa Clos y Penguin Pete, la mascota de Diamond Peak Ski Resort estarán esperando a los aventureros en las pistas de esquí, para tomarse fotos con ellos y regalarles dulces. Lo anterior forma parte de la celebración de "La Aurora Boreal en Tahoe", en la que se estarán desarrollando otros eventos de temporada.
Por otro lado, en Arizona, también hay varias propuestas navideñas. El Christmas at the Princess, en Scottsdale, es ideal para concretar un plan por demás peculiar: patinar sobre hielo en el desierto y completar la tarde asando bombones para comer los adictivos s'mores en un plan muy familiar.
En Phoenix, el famoso ZooLights convierte al zoológico de la capital en un espectáculo de luces, ahí las familias escuchan música y prueban mil y un delicias.
Flagstaff no podía quedarse atrás y los entusiastas de las fiestas decembrinas hallan en The North Pole Experience la oportunidad de ver la fábrica de juguetes de Santa y visitar la deliciosa repostería del sitio.
Por último, si quisieras vivir una experiencia que sea muy pero muy polar considera visitar Rovaniemi, capital de la la región de la Laponia finlandesa. Además de ser la puerta de entrada al Círculo Polar Ártico, este destino está considerado como el hogar oficial de Santa.
A unos 8 kilómetros del centro de Rovaniemi está la famosa Santa Claus Village (Villa de Santa Clos) que si bien está abierta todos los días del año, se antoja ser visitada -algún día- en plenos festejos navideños. Dentro de esta mágica villa está la oficina de correos de Santa quien, con ayuda de los elfos, leen las cartas con emotivos mensajes y peticiones que llegan de diversas partes del mundo.