Los países en los que sus habitantes y organismos tienen mayor libertad a la hora de utilizar Internet presentan un riesgo menor de sufrir ciberataques, pero sufren la misma falta de transparencia en las políticas de privacidad que los que viven en países cuya libertad está más limitada.
La compañía desarrolladora de 'software' de seguridad Avast publicó este viernes su primer Informe de Bienestar Digital, en el que analiza el grado de libertad de expresión 'online' de países de todo el mundo y los riesgos que presenta ésta para los usuarios.
Para elaborar este informe, Avast combinó sus datos sobre riesgos de ciberseguridad y retos de privacidad con el informe Libertad en la Red 2021 de Freedom House, en el que se evalúa el grado de libertad que tienen las personas que navegan por Internet en un país. En este caso, basándose en el grado de vigilancia y restricciones, como por ejemplo redes sociales bloqueadas, censura o debates 'online' deliberadamente manipulados, así como redes informáticas interrumpidas.
En primer lugar, la compañía definido qué se considera como libertad digital. Esta es la combinación de libertad digital, ciberseguridad y privacidad, sumada a la capacidad de un usuario de hacer uso de Internet de forma abierta, regulada, privada, informada y segura.
Una de las conclusiones más destacadas del informe determina que las personas que viven en países libres tienen un 30 por ciento de riesgo de ser víctimas de ciberataques, frente al 36 por ciento de las personas de países parcialmente libres o sin ningún tipo de libertad individual garantizada.
Estos resultados podrían estar relacionados con factores como el índice de violación de los derechos de los usuarios, la prohibición de los servicios de encriptación, la vigilancia estatal a gran escala, la recopilación de datos y la presencia de puertas traseras utilizadas para la vigilancia del Estado.
De ese modo, se plantea que existe una correlación indirecta entre la puntuación del índice de Libertad en la Red de un Estado y el índice de riesgo de sufrir un ciberataque.
Una de las causas que motivaría este resultado es que los países que no son libres suelen tene un PIB per cápita más bajo, lo que puede llevar a un uso de páginas y fuentes no seguras para acceder a contenidos gratuitos, juegos y películas, lo que supone una mayor exposición a riesgos 'online'.
En este sentido, el informe apunta que el país con menos riesgo de sufrir este tipo de ciberataques en la lista de los diez primeros más libres es Islandia, con un 33.2 por ciento de probabilidades de verse en esta situación.
Le siguen Estonia (30.8%), Canadá (26.9%), Costa Rica (27.6%), Alemania (24.1%) y Francia (27%), entre otros, países considerados como los de mayor libertad digital de acuerdo con los estándares de medición de Freedom House.
Taiwán, por ejemplo, presenta mayor riesgo de sufrir ataques por parte de los ciberdelincuentes (un 36.6%), pero en el grado de libertad 'online' se sitúa por delante de Alemania y Francia.
Por el contrario, el estudio determina que de los países menos libres con riesgo de ser víctima de ciberataques, se sitúa en primera posición China (46.6%), Myanmar (33.7%), Vietnam (43.3%), Arabia Saudí (33.9%) o Pakistán (40.2%).
En este caso, Egipto (44.7%) no solo se sitúa en sexto lugar de los países con menos libertades, sino que también se coloca como uno de los que presenta mayores riesgos de ciberataque, por delante de Emiratos Árabes (36.1%) y Uzbekistán (32.9%).
'SOFTWARE' ANTICUADO, TAMBIÉN OBJETIVO DE LOS CIBERDELINCUENTES
Otra de las conclusiones que arroja este estudio es la existencia de una correlación entre los riesgos de experimentar ciberataques y la antigüedad de los sistemas operativos utilizados.
Al comparar la clasificación en el Índice de Libertad en la Red de Freedom House con los datos internos de Avast, se puede deducir que, en los países con mayor riqueza económica, los usuarios tienden a tener sistemas operativos actualizados.
Gracias a ello, se pueden proteger mejor contra los ciberataques, al contrario que las naciones menos favorecidas, que tienden a utilizar sistemas operativos más anticuados. Este es el motivo por el que aumenta el riesgo de sufrir un ciberataque.
De hecho, los investigadores descubrieron que solo el 28 por ciento de los usuarios de los países libres digitalmente siguen utilizando sistemas operativos anticuados. Por el contrario, el 38 por ciento de los usuarios de los países parcialmente libres utilizan sistemas arcaicos, y los países totalmente censurados y controlados según el Índice de Libertad en la Red alcanzan un 40 por ciento.
Entre los países más favorecidos en este sentido se encuentran Alemania, Francia y Reino Unido, frente a Indonesia, Turquía y Bielorrusia, cuyos usuarios utilizan sistemas operativos más anticuados y vulnerables ante los ciberataques.
POLÍTICAS DE PRIVACIDAD INSUFICIENTES
El informe realizado por esta empresa desarrolladora de 'software', con base en una combinación de criterios propios con los parámetros de Freedom House, determina también que existen carencias en las políticas de privacidad de las páginas web, que son insuficientes.
Según Avast, es más probable que los sitios web de los países reconocidos como libres por el índice de Libertad en la Red tengan políticas de privacidad (un 70 por ciento) que los sitios web de los países considerados parcialmente libres (52%) y no libres (47%).
El informe también detalla que, aunque las políticas de privacidad son más frecuentes en estos primeros países, que gozan de mayor libertad de expresión digital, no quiere decir que estas sean legibles y entendidas por los usuarios.
"Si estas políticas de protección de datos son poco claras, su objetivo se pierde", apunta Avast en este informe, donde puntualiza que las condiciones de privacidad de países libres como Estados Unidos y Australia son "bastante vagas" y menos legibles que en Japón, Taiwán o Sudáfrica.
En estos tres últimos países, las condiciones de uso y privacidad son más claros y comprensibles frente a, por ejemplo, Italia o Argentina, que se encuentran en el extremo opuesto, ya que presentan políticas imprecisas y difíciles de comprender.
En cuanto a los países con libertad parcial, las páginas web de Kirguistán, Sri Lanka y Marruecos ofrecen un apartado de políticas de privacidad compensado, esto es, completo y legible; frente a Colombia (que sí integra estas condiciones, pero se entienden con mayor dificultad) o Túnez.
Finalmente, entre los países que no gozan de libertades de uso digital destaca Vietnam por contar con condiciones abundantes y entendibles, frente a Egipto, por ejemplo, que no solo no dispone de información incompleta, sino que tampoco es fácilmente comprensible.
Para concluir, Avast indicó que existe una gran brecha entre los países libres en torno a los hábitos digitales y aquellos que sufren la censura y el control por parte de las autoridades.
Además, la compañía reiteró que el bienestar digital de los ciudadanos de los países libres puede llegar a considerarse mayor, puesto que existen políticas de protección de su seguridad más reforzadas.
Asimismo, recomendó incentivar las políticas de privacidad más comprensibles y con protección más robusta, fomentar la 'higiene digital'. También propuso una estandarización abierta de las normas de identidad en plataformas y servicios en línea a nivel general.