Conoce las cuatro preparaciones de pastas que han enamorado a los comensales de casi todas partes del mundo. Cada uno de estos platillos se han convertido en clásicos de la cocina internacional
En el vasto y diverso mundo de la gastronomía, hay sabores que trascienden fronteras y se convierten en auténticas joyas culinarias. Entre ellos, cuatro preparaciones de pastas que han logrado conquistar el paladar de los más expertos sibaritas. Estas delicias no sólo son símbolo de la cocina italiana, sino que también han encontrado un lugar en las mesas de diferentes culturas, alrededor del mundo.
- Espagueti a la carbonara
Originario de la región de Lacio, este emblemático plato romano se prepara con espaguetis y una salsa hecha a base de huevos, queso Pecorino Romano, panceta (tocino) y pimienta negra.
De acuerdo con el "Gran Libro de la Cocina Italiana", de Carlo Berlusconi: "Existen diversas versiones acerca del creador de este plato de pasta. Algunos hablan de pasta a la manera de los carboneros, mientras que un investigador italiano sitúa la aparición de esta especialidad al término de la Segunda Guerra Mundial. Según su teoría, soldados norteamericanos estacionados en Roma hicieron amistad con algunos italianos, ante los que se presentaron con huevos y tocino pidiéndoles que les preparasen algún plato con ellos. Así se explicaría por qué en la preparación de estos espaguetis se utiliza el tocino ahumado".
- Lasagna
Este clásico italiano es un festín de capas alternadas, carne (generalmente de res o cerdo), salsa de tomate, bechamel y queso, típicamente mozzarella y parmesano.
De acuerdo con registros históricos los orígenes de la lasagna se remontan a la Antigua Grecia, donde existía un plato llamado "Laganon", que consistía en láminas de pasta intercaladas con carne y especias. Este concepto de capas se trasladó a la cocina romana, donde se utilizaban ingredientes similares.
Este plato comenzó a popularizarse en diferentes regiones de Italia, y cada una tenía su propia versión. En la región de Emilia-Romana, la lasaña a la boloñesa se convirtió en una variante icónica, utilizando ragú (salsa de carne) y bechamel, en lugar de solo queso. Esta versión se popularizó en el siglo 19, gracias a la influencia de la cocina de la corte de los Borbones.
- Fetuccini Alfredo
Originario de Roma, este plato destaca por su sencillez y cremosidad. Se elabora con fetuccini, mantequilla y queso parmesano, que se combinan para crear una salsa rica y suave.
De acuerdo con registros del restaurante Alfredo Di Roma: "Todo comenzó cuando Alfredo Di Lelio (Alfredo I), trabajaba en un pequeño restaurante familiar en la Piazza Rosa en Roma (desaparecida en 1910 después de la construcción de la Gallería Colonna / Sordi). En 1908 su esposa Inés, dio a luz a su primogénito Armando (Alfredo II), Alfredo Di Lelio preocupado por la salud de su esposa, preparó con sus propias manos fideos mezclados con mantequilla y queso parmesano fresco. Ella lo comió con mucho gusto y le sugirió agregar el platillo al menú de su pequeño restaurante".
En la actualidad, esta pasta es famosa y es el deleite de todo aquel que la disfruta, maridada con una buena copa de vino.
- Bolognesa
Esta pasta es muy popular, se prepara con una sabrosa salsa originaria de Bolonia y se caracteriza por su preparación lenta y meticulosa. Se hace con carne molida (una mezcla de res y cerdo), cebolla, zanahoria, apio, tomate, vino tinto y leche.
Más allá de su sabor inigualable, el espagueti a la boloñesa también representa la esencia de la cocina italiana: la búsqueda de ingredientes frescos y de calidad, así como la importancia de las tradiciones familiares. Es un plato que invita a reunirse en la mesa, compartiendo no solo comida, sino también momentos y recuerdos.