Papá es un superhéroe
Vivimos estos días la efervescencia por el Día del Padre, y la publicidad que busca convencernos de comprarle el mejor regalo. En estos anuncios es común escuchar que se dice “Papá es un superhéroe”. Yo quisiera hacer la invitación a que todos los que hemos recibido esta bendición llamada “paternidad”, seamos realmente superhéroes para nuestros hijos. ¿Cómo lograrlo? Fácil, imitemos los atributos que por lo general tienen estos personajes: 1) Un superhéroe es fuerte.- No todos podemos desarrollar esas musculaturas de envidia de los superhéroes, pero podemos mostrar a nuestros hijos un tipo de fortaleza más importante, la fortaleza interior, la fuerza del espíritu y el corazón. Enseñarles que, ante los problemas y las dificultades, somos capaces de mantener nuestra grandeza de ánimo, sin dejarnos derrotar por la adversidad. Eso les preparará a ellos para cuando tengan que enfrentar sus propios “archienemigos” (espiritual y emocionalmente hablando). 2) Un superhéroe lucha por la justicia.- Demostremos a nuestros hijos que sabemos ser justos y ecuánimes, sin abusar de la posición de autoridad que a veces nos adjudicamos por el lugar que ocupamos en el grupo familiar. Que en el hogar haya una “liga de la justicia” encabezada por papá, sin que este busque ventajas personales a expensas de los demás. 3) Un superhéroe tiene poderes.- Aquí les va, papás, una lista de poderes que podríamos poner en práctica con nuestros hijos: el poder de levantarles el ánimo cuando lo necesiten; el poder de brindar un buen consejo; el poder de curar un corazón herido; el poder de dar un bueno ejemplo. Les aseguro que estos, y otros de naturaleza similar, serán para nuestros hijos verdaderos súper poderes que ni la más fuerte kryptonita podrá debilitar. 4) Un superhéroe vela por las necesidades de otros.- La razón de ser de un superhéroe por lo general está ligada a la misión de velar por cierto grupo de personas. Nuestra razón de ser como padres está (o debiera estarlo) ligada a la importante misión que se nos confía de velar por las necesidades de nuestros hijos. El estar al pendiente de lo que necesitan, no solo en el plano material, sino sobre todo en el emocional, es en gran parte lo que nos hace merecedores del título de “padre”, que no es lo mismo que “engendrador”, cosa a la que algunos se limitan. 5) Un superhéroe siempre llega en el momento justo.- En las clásicas escenas de las películas de estos personajes, el superhéroe siempre llega a tiempo, siempre está ahí cuando se le necesita. La invitación que hago aquí es a que nos hagamos presentes en la vida de nuestros hijos, siempre en el momento justo, cuando ellos lo necesiten. Como lo dije: para un hombre, traer un hijo al mundo es la parte fácil. La parte difícil es estar ahí para criarlo y guiarlo, pero cuando lo hacemos, obtenemos dulces y hermosas experiencias que de ningún otro modo podríamos conocer. Esta es solo una lista ilustrativa, no limitativa, de lo que podemos hacer para convertirnos en papás superhéroes. Dejo a su imaginación y creatividad el encontrar algunos otros ejemplos y cualidades a imitar. Encontré hace días un papel que tenía guardado más de 50 años. Es un telegrama que mi papá me envió cuando trabajaba él en Tampico, yo todavía cursaba el jardín de niños aquí en Reynosa. Está fechado el 3 de abril de 1967, y dice: “Batman te recomienda lavarte con cepillo los dientes todas las mañanas”. En ese entonces, Batman era mi superhéroe favorito, así que mi padre seguramente pensó que aquellas palabras llamarían mi atención, cosa que efectivamente hicieron. Al reflexionar en esto que hizo mi padre, me doy cuenta del gran cariño y amor que encerró ese acto aparentemente tan sencillo. Pienso en ese hombre, de casi 67 años, haciendo un espacio en sus muchas actividades, caminando (porque no tenía carro) hasta la oficina de Telégrafos, y pensando en una manera sencilla pero significativa de hacerse presente en la vida de su pequeño hijo en una ciudad distante. La verdad es que, por ese y otros actos similares que acostumbraba realizar, él era más superhéroe que el murciélago encapuchado, al menos para mí. Ojalá que como padres estemos siempre dispuestos a hacer sacrificios, pequeños o grandes, los que sean necesarios, para que nuestro papel como superhéroes no sea solamente un “cliché” que se utiliza en la publicidad de estas fechas, sino que sepamos ser verdaderos superhéroes en la película para la que se nos contrató, y que se proyecta en la sala de cine más importante: el corazón de nuestros hijos. Y como dijera el Superman de mis tiempos, ¡A luchar por la justicia! ¡A luchar por nuestros hijos! ¡A luchar por merecer el título de “padres”! Bueno, Superman solo dijo lo primero, pero igual luchemos por todo lo demás. Vale la pena hacerlo. Feliz día del padre. jesus_tarrega@yahoo.com.mx Facebook: El Mensaje en la Botella