“Soy inocente”, alegó el diputado Mauricio Toledo, del Partido del Trabajo (PT), a horas de que en el Congreso de la Unión lleve a cabo la sesión en la que le quitaría el fuero para que enfrente las acusaciones por gastar 7.3 millones de pesos entre marzo de 2019 y febrero de 2011, para adquirir diversos bienes muebles e inmuebles.
Toledo es acusado de enriquecimiento inexplicable, ya que de esos 7.3 millones de pesos sólo justificó 5.1 millones, entre ellos 3.5 millones de un préstamo que recibió de la Cámara de Diputados cuando fue legislador por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), de 2009 a 2012.
Luego de que el pleno de la Comisión Permanente aprobó la realización de un segundo periodo extraordinario en la Cámara Baja, a partir de este miércoles 11, para votar el desafuero de Toledo y del morenista Saúl Huerta, acusado de abuso sexual de menores, aquél se dijo inocente del delito de enriquecimiento ilícito que se le imputa, y aseguró que es víctima de una persecución política.
En el caso Toledo hay suficientes pruebas de enriquecimiento ilícito: Sheinbaum
A través de un mensaje difundido en redes sociales, también manifestó que es víctima de desprestigio desde la Sección Instructora de San Lázaro y la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, “mediante un procedimiento donde ha sido evidente la violación sistemática al debido proceso, para llevarme a toda costa no sólo a un juicio de procedencia, sino para someterme arbitrariamente a un proceso penal que podría traer como consecuencia privarme de mi libertad siendo inocente”.