Pese a temor no solicitó protección de policías
Sospechaba juez Bermúdez que lo estaban siguiendo
Pese a temor no solicitó protección de policías
Dos semanas antes de ser ejecutado, el juez Vicente Antonio Bermúdez Zacarías pidió ayuda de una patrulla de la policía de Metepec, Estado de México, ante la sospecha de que lo estaban siguiendo.Él mismo se lo contó a su secretario de Acuerdos del juzgado Quinto de Distrito, Manuel Delgadillo, quien lo declaró ante agentes de la PGJEM que iniciaron las investigaciones del caso, que después fue atraído por la PGR.“El hoy occiso le comentó que al ir llegando al fraccionamiento donde vive observó que dos sujetos llegaron en una motocicleta, por lo cual ya no entró al fraccionamiento y continuó circulando, regresando minutos después acompañado de una patrulla”, se lee en un reporte de la Policía Ministerial.A pesar de esta situación que le generó temor, el juez no solicitó protección y continúo sus actividades hasta que la mañana del lunes pasado fue ejecutado. También se indaga una queja que la víctima presentó ante el CJF contra el juez al que suplió en el Juzgado Quinto de Amparo y Juicios Civiles Federales en el Estado de México.Esa queja también era contra la actuaria y esposa del juez, Mayumi Guadalupe Sánchez Torres, quien fue destituida de manera indefinida de su cargo. Las autoridades no han descartado que el ataque haya sido derivado de algún caso que atendió como juez, entre los que destacan procesos contra narcotraficantes.MEDIDAS PARA PROTEGER A LOS JUECESEl Consejo de la Judicatura Federal (CJF) está tomando medidas para garantizar un clima de seguridad para el desempeño de las labores de los juzgadores del Poder Judicial de la Federación (PJF), afirmó el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y del CJF, Luis María Aguilar Morales, mediante una carta enviada ayer martes a los jueces y magistrados que integran el PJF en todo el país.“Al impartir justicia damos el mayor tiempo de nuestras vidas, aun a costa de sacrificar la convivencia familiar. El capital más valioso del Poder Judicial de la Federación son sus integrantes, jurisdiccionales y administrativos. Y estamos tomando las medidas necesarias para que sus labores se lleven a cabo en un clima de seguridad, porque ésta es prioridad de los consejeros de la Judicatura Federal”, indicó.La carta, en poder de EL UNIVERSAL, fue enviada a los juzgadores mediante correo electrónico con motivo del asesinato del juez Vicente Antonio Bermúdez Zacarías ocurrido este lunes afuera de su domicilio en Metepec, Estado de México.Aguilar Morales informó a los mil 398 juzgadores federales al frente de los 888 órganos jurisdiccionales del país que el CJF se encargó de la seguridad de la familia del juez Bermúdez. “Desde que se tuvo conocimiento de este hecho el Consejo de la Judicatura Federal se hizo cargo de la seguridad de la familia del señor juez y de toda asistencia que pueda requerir”, dijo.“No puedo negar que este hecho cimbra a cada uno de nosotros, pero debemos tener claro que como Poder Judicial de la Federación somos más fuertes”, señaló.Recordó que la SCJN y el CJF condenaron el homicidio y demandaron el esclarecimiento del caso.“Saber el origen del ataque, venga de donde venga, es esencial para la justicia y para una sociedad que quiere vivir en paz. Así lo expresé personalmente ante su viuda”, dijo.Luego de la ejecución del juez Bermúdez se dio a conocer el video en el que se observa cómo un sujeto se le acerca por la espalda para dispararle en la cabeza y posteriormente huir mientras agonizaba en la calle.Al respecto, el CJF condenó la filtración del material por considerar que debió mantenerse en la reserva de las indagatorias. “Se afectan los derechos humanos de intimidad de la viuda y sus menores hijos”, dijo Aguilar Morales en la carta.Hasta ahora el Consejo tiene registrada la ejecución de cuatro juzgadores federales, contando a Bermúdez Zacarías, desde noviembre de 2001, cuando dos magistrados de tribunales colegiados de Sinaloa fueron ejecutados en Mazatlán.En 2006 el juez federal René Hilario Nieto Contreras, encargado de casos relacionados con cárteles como el de Los Arellano Félix, el del Golfo y el de Juárez, fue baleado desde un automóvil en marcha.