CLICHY, Francia.
Activistas ambientales se encadenaron el martes a las puertas y torniquetes de las instalaciones de Amazon cerca de París y acusaron a la compañía de destruir el mercado laboral y de perjudicar el planeta.
Los manifestantes también irrumpieron en las instalaciones de Amazon en Tolosa, al sur del país, y Lille, en el norte, con la esperanza de inspirar acciones similares en otras partes del mundo.
Amazon Francia no comentó sobre las protestas.
Varias decenas de manifestantes escalaron una reja y se abrieron paso hacia las oficinas de Amazon en el extremo norte de París y protagonizaron una sentada en el patio y el vestíbulo de las instalaciones. Se permitió a los empleados salir del edificio, pero no reingresar.
Los activistas, en su mayoría estudiantes voluntarios de alrededor de 20 años de edad, dijeron que se encadenaron a puertas y torniquetes en el interior del lugar. En el exterior, algunos jugaron al fútbol, escucharon música y dijeron que se preparaban para pasar la noche ahí de ser necesario.
Algunos de ellos vestían chalecos amarillos.
Los organizadores de la manifestación pidieron al gobierno bloquear la autorización de tres nuevas bodegas de Amazon previstas en distintas partes del país. Acusaron a la compañía de eliminar empleos de los comercios locales, no pagar suficientes impuestos y acelerar el cambio climático debido a las emisiones utilizadas en el transporte de enormes volúmenes de productos.
“Acusamos a Amazon de empeorar las cosas en términos de sobreproducción y cambio climático”, especialmente a través de las importaciones a gran escala de artículos electrónicos y ropa que vende en línea, cuyo transporte incrementa las emisiones de carbono”, dijo Alma Dufour del grupo Friends of the Earth (Amigos de la Tierra).