El Clásico Sudamericano parece ser ya un partido más para Brasil.
Catorce años han pasado desde la última vez que Argentina venció a la Canarinha en un duelo oficial, racha que se alargó este martes gracias al triunfo 2-0 que puso a la Verdeamarelha en la Final de la Copa América que alberga.
La Albiceleste la pasa mal cuando visita la casa de su archirrival. En 11 cotejos nunca ha podido ganar y en estas Semifinales estuvo lejos de hacerlo pues el partido se rompió antes de lo esperado gracias a una genialidad de Dani Alves.
El capitán brasileño hizo un sombrerito, recortó y cedió a Roberto Firmino quien cruzó el esférico para que Gabriel Jesus colocara el 1-0 al 19'.
Argentina reaccionó sin mucha claridad. Encontró una jugada de peligro a balón parado con un servicio de Leo Messi, que antes de pegar en el travesaño fue cabeceado por Sergio Agüero al 30'.
El segundo tiempo mantuvo la misma tónica, Brasil esperó, sin asustarse de más ante los efímeros embates albicelestes. Un disparo lejano de Lautaro Martínez y una pelota parada de Messi fue lo único de Argentina en el complemento.
Los locales aprovecharon los espacios y tras confusiones en la zona baja, Jesus arrastró la pelota hasta el área chica y le devolvió la cortesía a Firmino, quien puso cifras definitivas al 71'.
Brasil ya le tomó la medida a Argentina, llegó a cinco victorias en duelos de nocaut en Copa América ante su archirrival, que llegará a 26 años sin conseguir un título.
Los locales esperan al ganador de Chile, el actual bicampeón del torneo, y Perú.
SEGUIMIENTO:
PREVIA
Belo Horizonte, Brasil.- La selección de futbol de Brasil quiere espantar muchos “fantasmas” cuando enfrente a su similar de Argentina, que buscará eliminar a su acérrimo rival en duelo de semifinales de la Copa América 2019.
La escuadra verde-amarelha ha sufrido de más para llegar hasta estas instancias, no sólo por el duelo de cuartos de final ante Paraguay, que lo tuvo que definir en penales, sino en general, más allá de la goleada sobre Perú y el triunfo holgado con Bolivia.
Su desempeño ha estado lejos de ser avasallador, le ha costado generar futbol al frente, porque tienen la pelota pero no la claridad para reflejarla en ocasiones claras de gol, ante rivales en teoría muy inferiores.
Para no quedarse en la orilla es necesario que aproveche las ocasiones que pueda generar, las cuales, ante un rival de este nivel, al parecer no serán muchas.
Mientras que la albiceleste tampoco ha sido espectacular; resolvió con lo mínimo el duelo con Venezuela, pero no ha sido ese cuadro que domina a los rivales y que se supone debería ser, por la calidad de su plantel.
Este es el momento ideal para que su gran figura, Lionel Messi, retome su mejor nivel, ya que necesita demostrar su calidad y callar a sus detractores que lo acusan de no cargarse al equipo en los momentos importantes.
El jugador del Barcelona de España, sin embargo, no puede solo, y requerirá el apoyo de sus compañeros para lograr un boleto para estar en la final de esta competencia por tercera ocasión consecutiva.