El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos prevé que Ignacio se mantendrá muy por debajo de la fuerza de un huracán y se desvanecerá a depresión para el martes.
El vórtice de la tormenta se ubicaba el lunes temprano a 665 kilómetros (415 millas) al suroeste del extremo sur de la península de Baja California, en dirección oeste-noroeste a 15 km/h (9 millas) con vientos máximos sostenidos de 65 km/h (40 mph).
Hacia el oeste, el huracán Hilda tenía vientos máximos sostenidos de 130 km/h (80 millas), aunque los meteorólogos dijeron que comenzará a debilitarse el martes.
El ojo del huracán se localizaba a 1.570 kilómetros (975 millas) al oeste-suroeste del extremo sur de Baja California y se dirigía hacia el noroeste a 11 km/h (7 millas).