Iván Reyes Arzate, excomandante de la Policía Federal que entregó información de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) a cárteles mexicanos, se declaró culpable de conspirar para distribuir cocaína.
Quien fuera cabeza de la Unidad de Investigaciones Especiales de la Policía Federal entre 2008 y 2016 admitió su culpabilidad ante el juez federal Brian Cogan en una corte neoyorquina.
La declaración del culpabilidad significa que Reyes Arzate colabora o colaborará con los fiscales y eso podría representar problemas para Genaro García Luna, ex Secretario de Seguridad Pública preso en Nueva York tras ser acusado de narcotráfico y en espera de ir a juicio.
Los fiscales del distrito sur de Nueva York han dicho que algunas pruebas en el caso de García Luna son las mismas que en el caso de Reyes Arzate, y también fueron mostradas en el juicio a Joaquín “El Chapo’’ Guzmán, ex líder del Cártel de Sinaloa.
Incluso, el juez Cogan preside el caso de García Luna y presidió el de Guzmán, quien ya fue sentenciado a cadena perpetua.
Desde 2008, Reyes Arzate fue el principal enlace entre la DEA y la Policía mexicana. Sin embargo, Estados Unidos lo acusa de entregar información a cárteles como el de los Beltrán Leyva y El Seguimiento 39, asociado con el Cártel de Sinaloa, a cambio de miles de dólares.
“Siendo integrante del servicio público mexicano y a cambio de un pago estuve de acuerdo en darle a una organización de narcotráfico datos que facilitarían la distribución de cocaína, estando consciente de que eso era un delito’’, declaró ayer el ex mando ante el juez.