Sacerdote apuñalado en la Catedral es trasladado a la CDMX

El padre José Miguel Machorro será atendido en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, donde continuará su recuperación

CIUDAD DE MÉXICO.- El padre José Miguel Machorro Alcalá será atendido en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, donde continuará con su recuperación.El padre José Miguel Machorro Alcalá, apuñalado el pasado 15 de mayo en la Catedral Metropolitana, fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, para continuar con su recuperación.A bordo de un helicóptero del gobierno de Puebla, el sacerdote fue trasladado al nosocomio de la Ciudad de México.Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis de México, señaló que la Presidencia de la República dio instrucciones para que el sacerdote pueda ingresar sin complicaciones a este nosocomio y sea atendido a la brevedad.El Gobierno de Puebla ofreció trasladar de emergencia al sacerdote al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, ubicado en la Ciudad de México, debido a que su vida se encuentra en grave riesgo y es necesario que se recupere de los problemas de desnutrición que presenta, para poder posteriormente recibir atención a nivel neuronal, que es donde se encuentra la raíz de las complicaciones de salud que ha registrado últimamente.El helicóptero, perteneciente al Gobierno de Puebla, mismo que está asignado a Servicios de Urgencias Médicas Avanzadas, partió a las diez de la mañana del Hospital General de Tehuacán, y llegó al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición alrededor de las 11:30 de la mañana.De acuerdo con información publicada en el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (Siame) debido a la intervención del cardenal Norberto Rivera Carrera, la Presidencia de la República se ha encargado de dar cauce los trámites para facilitar el ingreso del sacerdote a dicho hospital, a fin de que sea atendido de inmediato y logre salvar la vida.Personal médico del Hospital General de Tehuacán (Puebla) había informado el sábado pasado que el sacerdote se encontraba sumamente delicado debido a un problema intestinal de carácter infeccioso, lo que provocó inflamación del cuerpo, presión baja y distensión del intestino al punto de la parálisis; además de tener problemas de riñón, producto de las heridas que sufrió el 15 de mayo al ser víctima de un ataque con arma punzocortantes cuando terminaba de oficiar una Misa en la Catedral Metropolitana de México.