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Los organizadores indicaron que llevaron la piñata para hacer una declaración pública.
Algunos usuarios de redes sociales aplaudieron la idea mientras que otros mostraron su molestia, al señalar que los padres inculcaron odio en sus hijos.
Anthony Martínez, líder de los Brown Berets, grupo activista que busca terminar con las desigualdades, dijo que originalmente era una piñata de Batman pero decidieron transformarla.
"No fue pensado de manera negativa en absoluto hacia la aplicación de la ley", dijo Martínez.
"Algunos padres sostenían a sus hijos para golpear la piñata".
Asimismo, Martínez dijo que el grupo realizó una declaración contra las reciente acciones del Gobierno federal respecto a la deportación de migrantes.
Asimismo, el líder admitió que en el mismo evento ofrecieron a los niños la oportunidad de lanzar pelotas contra una imagen del Presidente Donald Trump.