En 1940, la cocina de la época era sencilla y clásica en todos los negocios que servían al turismo en Reynosa
Reynosa Costumbres y tradiciones 2ª Parte
En 1940, la cocina de la época era sencilla y clásica en todos los negocios que servían al turismo en Reynosa
Desde un punto de vista de la escuela antropológica adaptacionista, el ser humano en su intento por perpetuarse como especie se acopla a los variados entornos geográficos que ofrece el mundo, asumiendo hábitos particulares que practican con frecuencia; estos comportamientos son las costumbres de la vida cotidiana que enmarcan a cada grupo social del planeta; una idiosincrasia distintiva, en el caso de grupos puntualizados localmente, que conforman un determinado carácter nacional, regional o local. Las costumbres las asume toda una comunidad que hace que se distinga de las demás; como son las danzas, fiestas, comidas, lenguaje, artesanías, etcétera, éstas se van transmitiendo de una generación a otra, ya sea en forma oral, gráfica o como instituciones. Con el tiempo, estas costumbres se convierten en tradiciones.Gastronomía de RestaurantSegún datos recabados del antiguo administrador del casino Montecarlo en la década de 1940, la cocina de la época era sencilla y clásica en todos los negocios que servían al turismo en Reynosa; ya fuera la de los restaurants U.S. Bar, Sam’s, Meca, Tívoli o Montecarlo. Las carnes que se preparaban eran el filete mignón con champiñones, pollo, pavo y cabrito estofado. El filete se conseguía en las carnicerías de Reynosa y de igual forma el cabrito. El pollo y el pavo se obtenían frescos en una granja de Pharr, Texas. Entre las especialidades culinarias se preparaban las ancas de rana (especie pequeña) y la codorniz, ambas provenían de esta región. Los platillos eran acompañados con una ensalada de apio y tomate con salsa inglesa, frijoles refritos y arroz. El postre se presentaba en una fuente y se servía de acuerdo con la estación, mango manila con su hueso o trozos de piña. No existía otro tipo de postres como nieves, flanes o pasteles. En sus orígenes la cantina para el turismo era en base a la ginebra, ron, tequila, whiskey escocés y americano (burbon) del cual se preparaban un sinnúmero de bebidas que pedía el turista. El wiskey se volvió a surtir después de la guerra. La tradición restaurantera ha evolucionado mucho y hoy en día es muy variada. En la actualidad es regulada a través de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC).MúsicaEn Reynosa se ha dado todo tipo de música, desde grandes orquestas en la década de la Segunda Guerra Mundial, hasta grupos de jazz, de rock and roll en las décadas de 1960, etc. Una de las más representativas ha sido la música regional de conjunto.La música norteña evolucionó alrededor de un instrumento musical históricamente nuevo, se desarrolla a partir de la tercera década del siglo XIX; lo que conocemos como acordeón diatónico o de botones.La música europea de bailes de salón, conocida como polca, vals, chotis y mazurcas, fue infiltrada al noreste de México por los alemanes que llegaron a la región central de Texas desde la década de 1840; al igual que por los regimientos de franceses, austriacos y belgas que invadieron el norte durante la intervención francesa de Maximiliano en la década de 1860. Tradicionalmente pequeñas bandas musicales de violines, instrumentos de viento y guitarras alegraron los festejos y bailes norteños. Fue a finales del siglo XIX que el acordeón de una sola hilera de botones pudo sustituir a toda una banda por su acompañamiento integrado; se utilizó para amenizar los bailes en ranchos y comunidades del noreste de México. El sonido fuerte y sonoro del acordeón se adaptó magníficamente a los festejos y bailes del noreste de México que se presentaban generalmente a cielo abierto y no en salones de baile cerrados. Los acordeonistas eran músicos que no estudiaban en un conservatorio o una academia de música, aprendían de oído y sus conocimientos se pasaban de generación en generación. Algunos de ellos lograron ser grandes virtuosos de este instrumento.Reynosa tuvo mucho que ver con la dispersión y la tradición musical del acordeón en el noreste de México. De ahí partió don Jesús Villarreal a dispersar la semilla de este instrumento en General Terán, Nuevo León. También surgió Pedro Ayala, uno de los acordeonistas pioneros en el sur de Texas. El famoso compositor de China, Nuevo León, Antonio Tanguma, autor de melodías como Cerro de la Silla, Evangelina y el Naranjo, en algún tiempo fue atraído por el atractivo musical fronterizo. Al avanzar el siglo XX en Reynosa surge un nuevo género musical. En la década de los 1930, el reynosense Narciso Martínez, “ El Huracán del Valle”, que vivía entonces en Texas, se asoció con Santiago Almeida quien tocaba el bajo sexto, creando así lo que es el género musical conocido como “Conjunto.”A estos dos instrumentos más tarde se les agregaría el contrabajo o tololoche, la tarola y en ocasiones el saxofón. El repertorio no solo abarcaba la tradición europea del siglo XIX, si no que incluía la tradición musical mexicana de canción ranchera, corrido, bolero ranchero y huapango. Para entonces ya se usaba el acordeón diatónico de dos hileras, al que posteriormente se le sumaria el de tres.Las voces de solos y duetos de este género musical son inconfundibles. Un importante número de conjuntos que se desarrollaron y sobresalieron en este género a nivel nacional e internacional vivieron en Reynosa mientras despegaban sus carreras profesionales.Tradición ReligiosaDebido a que Reynosa fue bautizada bajo la advocación de Nuestra Señora de Guadalupe y ante el fervor de religión de sus ciudadanos hacia la Virgen, el 12 de diciembre de cada año es el evento religioso más representativo de la ciudad, donde una gran cantidad de fieles acuden a la parroquia y a la plaza principal desde diferentes puntos de la localidad. Tradición del BeisbolEl beisbol ha tenido un gran arraigo en Reynosa desde las primeras décadas del siglo pasado, contando siempre con una gran afición. En sus inicios se practicó en campos llaneros, desde luego sin asientos ni gradas. Se sabe que en 1916 existía en Reynosa una novena llamada Manuel González Ochoa. Este conjunto se enfrentaba a equipos de beisbol en ambos lados de la frontera, entre Texas y México. Sus encuentros ocurrían en la manzana de la actual Plaza Niños Héroes, que se conoció antiguamente como Plaza Benito Juárez.A partir del año de 1927 los deportes de equipo (beisbol, basquetbol, futbol y volibol) fueron introducidos en las escuelas. De Reynosa se conocieron los equipos Carta Blanca, Corona, Reynosa, WW Hacheros Internacionales, Novena El Fénix, Club Aztecas y Novena Los Gallos de beisbol, equipos que existieron hasta la década de 1940. De los lugares donde se realizaron encuentros además de la Placita, se recuerdan el antiguo campo militar, El Cuadro cerca del río Bravo o La Pedrera hacia el sur de la ciudad. Dos parques bardeados se construyeron en esa misma década.El primer estadio de la ciudad, Parque de Beisbol Presidente López Mateos, fue inaugurado el 14 de junio de 1962. En este parque el equipo los Broncos llegó a obtener el campeonato Gallardete de la Liga Mexicana de Beisbol. El municipio ha contado con una serie de ligas de beisbol desde 1946: Liga Municipal de Beisbol, A.C.; Liga Industrial y Comercial de Beisbol, Liga Independiente, Liga Municipal Libre y Liga Reynosa.Desde 1962, las Ligas Pequeñas han logrado la convivencia y la unión entre los reynosenses, las cuales han aportado importantes deportistas profesionales. Entre ellas se encuentran la José Guadalupe Treviño Kelly, A. C., Infantil y Juvenil Niños Héroes, A. C., Independiente, Industrial, Lampacitos, Universitaria y Reynosa. Estas ligas han estado afiliadas a la Federación Mexicana de Beisbol y a la de Williamsport, Pensilvania de los Estados Unidos, donde las dos primeras han competido a nivel mundial en la categoría de 11 y 12 años.Estas son tan sólo algunas prácticas o actividades de las tradiciones de los ciudadanos reynosenses que están profundamente arraigadas con su identidad y su carácter único. Su historia inicia en 1749 con los primeros pobladores liderados por el capitán Carlos Cantú González, que fundaron la improvisada villa de Nuestra Señora de Guadalupe de Reynosa a 22 kilómetros río arriba de la actual Reynosa.Escandón aprobó con entusiasmo el establecimiento de la villa de Reynosa, al estar fundando en el Llano de las Flores la villa Señora Santa Ana de Camargo, al enterarse del arrojo e iniciativa del capitán Cantú. Otras tradiciones surgieron y evolucionaron después de trasladar la villa a las lomas de San Antonio en 1802, en donde ésta se elevó a ciudad en 1927. Las costumbres y tradiciones personifican el alma de un pueblo y emanan de sus valores, estilo de vida, creencias y sus distintas formas de expresión.
INICIADORES. Músicos locales fueron grandes impulsores del uso del acordeón en el noreste de México.
ORGULLO. Con más de 100 años de practicarse en la región, el beisbol es una de las tradiciones más arraigadas en Reynosa.