En un contragolpe a la ofensiva de ataques y destrucción de torres de videovigilancia del Centro de Comando y Control C-5, agentes de élite del Grupo de Operaciones Especiales (Gopes) de la Policía Estatal detectó y desarticuló una red ilegal de videovigilancia, operada por el crimen organizado en la ciudad de Reynosa.
La Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas informó que más de 100 cámaras de video remoto clandestinas, conectadas de manera ilegal mediante el robo de señales wi-fi caseras o de negocios, fueron desmanteladas en las últimas horas.
La ciudad de Reynosa ha sido escenario de tiroteos, persecuciones, bloqueos y ataques a instalaciones de seguridad, donde hombres armados acribillaron y estrellaron camiones de carga contra las estructuras de las videocámaras del C-5 destruyendo al menos una treintena de dispositivos de vigilancia remota.
La dependencia emitió un exhorto a la población para denunciar cualquier sospecha de uso ilegal o robo de señal de sus redes inalámbricas o de la presencia de cámaras que pudieran estar siendo usadas para cometer delitos.
Las cámaras desmanteladas por los policías de Gopes estaban instaladas en postes, registros telefónicos y de luz, cuya señal era transmitida por Internet.
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado reveló que continúan las investigaciones para determinar el lugar donde se reunían y compilaban todas las imágenes.
Los grupos delictivos operan redes ilegales de videovigilancia para observar los movimientos de corporaciones de seguridad federales y estatales o para cubrir sus actividades ilícitas.
Las más de 100 cámaras de video remoto fueron puestas a disposición de autoridades ministeriales para la continuación de las investigaciones y detener a los responsables.
La Secretaría de Seguridad Pública y el Grupo de Operaciones Especiales continuarán llevando a cabo estos operativos con el compromiso irrenunciable de cuidar y proteger a las familias tamaulipecas.