Responde titular de la CNDH a AMLO

Expuso que también están los diferendos con el gobierno pasado

Ciudad de México.

El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, sostuvo que este organismo no tiene adversarios ni busca confrontarse con el presidente Andrés Manuel López Obrador, en cambio es una institución de contrapeso sano, y rechazó que haya actuado a modo durante el gobierno anterior.

Aseguró que el cambio de régimen no debe implicar que no se cumplan las recomendaciones y reiteró que la CNDH no tiene adversarios, pues no se puede tener adversarios en la defensa de la dignidad humana.

El obudsman nacional también rechazó que la CNDH haya sido una instancia a modo durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.

“Mi mejor respuesta son las evidencias, se dice, porque fue parte de la expresión en la mañana (durante la conferencia de prensa), que nunca nos dirigimos en casos como Tlatlaya, Tanhuato, ABC, Iguala, Nochixtlán. Ahí están las recomendaciones y fuertes", subrayó en entrevista.

Expuso que también están los diferendos con el gobierno pasado y "ahí está cómo frente al titular del Poder Ejecutivo del gobierno pasado le dije que no se cumplían sus instrucciones".

Luego que el presidente Andrés Manuel López Obrador cuestionó la autoridad moral de la CNDH para opinar sobre las estancias infantiles, el ombudsman llamó a un diálogo respetuoso, firme y de interacción, no de confrontación ni de adversarios.

Instó a un diálogo que lleve, más que a desgastar a una institución, a fortalecerla “y cualquier iniciativa hacia la CNDH sea de fortalecimiento y no de debilitamiento.

"Cuando se lesiona la credibilidad o se cuestiona la autoridad moral de la institución se está cuestionando, se está lastimando y se está faltando al respeto a las víctimas de derechos humanos”, apuntó.

"La CNDH no busca en lo absoluto confrontarse, desde luego me sorprendió y me preocupó las expresiones como las dichas por el señor presidente, a quien yo respeto en lo personal y en lo institucional, aunque no comparto su visión creo que me parece grave que se condene la disidencia o se disienta en las visiones", expresó.

Dijo desconocer si con ello se busque inhibir las atribuciones de la CNDH. "Creo que al señor presidente no le están acercando la información objetiva, puntual, que permita tener información exacta, precisa, y que le están haciendo incurrir en impresiones o inexactitudes".

Afirmó que la CNDH desde siempre ha dando un pronunciamiento firme y respetuoso de la no militarización desde el sexenio pasado, y recordó que incluso interpuso una acción de inconstitucional que le generó diferendos con el gobierno de Peña Nieto .

Enlistó algunos asuntos en los que la CNDH se ha pronunciado en pasadas administraciones como los de Apatzingán, Nochixtlán, Iguala y ABC, en un periodo anterior a su presidencia en la Comisión, pero se alzó la voz.

Recordó que la Comisión también calificó de grave el caso de Tlatlaya "y fui denunciado penalmente por defender que no hubiera impunidad en el caso".

Cuestionado sobre si la CNDH tienen la calidad moral, respondió: "Tan tiene calidad moral que ahí están los pronunciamientos y ahí está la respuesta de la sociedad solicitando nuestra intervención, ahí está el crecimiento en el número de las quejas”.

Insistió en que le preocupa y ocupa que se hagan expresiones como las del Ejecutivo e invitó a trascender las mismas, pues el Presidente es una gente de convicción democrática, “lo ha señalado, por eso yo apelo a que se dé esta congruencia".

Señaló que la CNDH es una institución de contrapeso sano y no confrontativo, "no es adversario de las instituciones, busca coadyuvar, podemos tener diferentes puntos de vista pero ahí están las ideas, los argumentos para debatir, creo que no debe ser polarizando el diálogo entre las instituciones".