En el dilema aun de los hechos ocurridos el pasado jueves, en torno a su hubo o no una auténtica amenaza de bomba o fue un simulacro, en el desarrollo de dicho episodio presuntamente hubo una distracción de cantidades de dinero en efectivo de varias oficinas de Palacio Municipal.
Según declaraciones del alcalde Carlos Peña Ortiz, de su oficina particular en Palacio hay un faltante de 2 mil 500 pesos que echó de menos, tras la incursión de elementos policiacos y militares. Aunque sus señalamientos los ha dirigido a elementos de la Policía Estatal.
La oficina del secretario del Ayuntamiento, José Luis Márquez es la que reclama un monto de 421 mil pesos en efectivo que fueron asegurados en el proceso de cateo, tras la presunta amenaza de bomba en Palacio Municipal.
Como si el funcionario fuese depositario de dinero de los contribuyentes, en conferencia de prensa el pasado viernes exigió la devolución de dicha cantidad de dinero en efectivo, sin precisar si su oficina es ahora una caja de Finanzas Municipal autorizada.
El dinero se encuentra en custodia de la Fiscalía General del Estado, que solo demanda que sea justificado la tenencia de esos 421 mil pesos en efectivo que había en la oficina del secretario del Ayuntamiento y esclarecer su origen ara descartar la comisión de algún delito sancionado por la Ley.
El Ayuntamiento reclama el dinero acusando de robo a los elementos de seguridad tras el operativo.