Cd. de México.- El juez que lleva el caso de Pablo Lyle, quien enfrenta cargos por homicidio involuntario en Estados Unidos, rechazó el alegato de que el actor actuó en defensa propia tras golpear a un hombre en un incidente de tránsito, por lo que fijó una nueva audiencia para el 22 de agosto.
La defensa del famoso insistió en la audiencia que se llevó a cabo este jueves que tiene pruebas que el comportamiento de Lyle en el incidente, ocurrido el 31 de marzo pasado, fue razonable.
Al salir de la corte, en Miami, la estrella de Mirreyes Contra Godínez agradeció a los medios de comunicación y las muestras de apoyo de las personas que han seguido su caso.
"Solamente quiero agradecer a la gente las muestras de apoyo y cariño. Hay un proceso en camino y no puedo dar más (información)", indicó en una breve declaración.
Durante la audiencia de este jueves, la familia del cubano Juan Ricardo Hernández también expresó, a través de sus representantes, su preocupación porque sufren acoso de los medios de comunicación.
Un día antes, Bruce Lehr, abogado de Lyle, informó que la defensa no estaba preparada para enfrentar el juicio contra el actor mexicano.
En entrevista para el programa El Gordo y la Flaca, de la cadena Univision, explicó que aún esperan documentos de la situación médica de Juan Ricardo Hernández.
Señaló, además, que las declaraciones hechas por su pareja, Mercedes Arce, a un programa de televisión, podría favorecerlos, ya que asegura que la víctima había tenido un día difícil cuando sucedió el incidente vial.
El famoso fue detenido el pasado 31 de marzo en el aeropuerto de Miami, luego de golpear a Juan Ricardo Hernández, de origen cubano, quien quedó inconsciente tras un accidente de tránsito.
El 4 de abril, la víctima permaneció en terapia intensiva por unos días y posteriormente la familia decidió desconectarlo del respirador artificial que lo mantenía con vida.
Tras el deceso y una vez que se revisaron las pruebas presentadas, se le fijó una fianza al actor de 50 mil dólares para su libertad condicional y arresto domiciliario con grillete