Prueban revisión fast-track de asilo

La idea es que los migrantes que buscan refugio en Estados Unidos reciban una respuesta en 10 días o menos

McAllen, Tx.- El Gobierno de Donald Trump puso en marcha un programa secreto en la frontera sur con el que busca acelerar la deportación de los solicitantes de asilo, informó The Washington Post.

El programa, que lleva por nombre “Revisión Rápida de la Solicitud de Asilo”, comenzó a implementarse este mes en la zona de El Paso (Texas), que se ha convertido en un banco de pruebas de las políticas fronterizas de Trump.

Posteriormente se realizará en las ciudades de McAllen, Laredo, Brownsville.

La idea es que los migrantes que buscan refugio en Estados Unidos reciban una respuesta en 10 días o menos, en comparación a los meses o años que suele durar el proceso, dijeron funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), de acuerdo con el medio.

“Las revisiones son principalmente para determinar si los migrantes centroamericanos pueden ser enviados de regreso a sus países de origen”, indica The Washington Post.

Un funcionario de la CBP dijo al medio que tras ser detenidos en El Paso los migrantes son llevados a una unidad de la Patrulla Fronteriza que recién abrió en agosto y que permanece en gran parte vacía porque el número de migrantes puestos bajo custodia se ha desplomado en los últimos meses.

Ahí, les dan un día para llamar a su familia o a un abogado, y luego ya se entrevistan con los funcionarios de asilo para determinar si existe un temor creíble de ser perseguidos si regresan a sus países.

Abogados de inmigración y la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) han denunciado que este programa piloto niega a los solicitantes de asilo el debido proceso, y limita el margen de maniobra de los abogados, pues a éstos no se les permite reunirse con sus clientes en las estaciones de la Patrulla Fronteriza, y sólo pueden sostener breves conversaciones telefónicas.


La patrulla fronteriza. Eluden al Congreso y a la opinión pública

“Este es otro ejemplo de la Patrulla Fronteriza llevando a cabo programas pilotos en secreto, eludiendo al Congreso y el escrutinio público”, dijo Astrid Dominguez, directora del Centro de Derechos Fronterizos de la ACLU, de acuerdo con el Post.

“La Patrulla Fronteriza está acelerando las deportaciones mientras retiene a los migrantes en centros de detención... Y prohíbe la supervisión para garantizar un trato humano y justo. Dado el historial de abusos de la Patrulla Fronteriza, lo último que se le debiera permitir a la agencia es empujar a los migrantes a un proceso de toma de decisiones de vida o muerte desprovisto de protecciones básicas del debido proceso”.

En los últimos meses, la Administración Trump ha implementado políticas para restringir cada vez más las solicitudes de asilo a los migrantes centroamericanos.