Los funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos recuerdan al público que los ingredientes de ponche, las guayabas, las manzanas de espino y la caña de azúcar tienen prohibido ingresar a los Estados Unidos.
Ponche, un ponche tradicional mexicano para las fiestas, se comparte y disfruta entre muchas familias a lo largo de la frontera suroeste durante la temporada navideña. Sin embargo, los ingredientes utilizados para su elaboración, guayabas (guayabas), manzanas de espino (tejocotes) y caña de azúcar, no están permitidos cuando se importan a través de un puerto de entrada de pasajeros, como lo es el paso fronterizo de San Ysidro. La caña de azúcar debe pelarse adecuadamente, quitarse los nudos e inspeccionarse antes de que se pueda considerar su entrada en el procesamiento de pasajeros.
Los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza y los especialistas en agricultura esperan un aumento en los intentos de importación de los ingredientes prohibidos.
Los artículos prohibidos presentan importantes riesgos de plagas. Las manzanas de espino, y especialmente las guayabas, son hospedadores de moscas de la fruta exóticas.
“Es una parte importante de la misión de CBP identificar y detener plagas y enfermedades en la frontera antes de que se propaguen a otros lugares, por lo que los oficiales de CBP y los especialistas en agricultura estarán atentos a estos elementos”, dijo Pete Flores, Director de Operaciones de Campo, en San Diego.
“Los viajeros pueden evitar retrasos y sanciones recordando que estos artículos están prohibidos y declarando todos los artículos que están trayendo a los Estados Unidos”.
LAS MOSCAS DE LA FRUTA
Según el Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, las moscas de la fruta se encuentran entre las plagas más destructivas de frutas y verduras en todo el mundo.
Las moscas de la fruta pasan sus etapas larvales alimentándose y creciendo en más de 400 plantas hospedantes.
La introducción de estas plagas en los Estados Unidos podría causar pérdidas económicas que van desde la ruina de los cultivos de productos hospedantes por las larvas, los costos asociados con la implementación de medidas de control y la pérdida de participación en el mercado debido a restricciones a las exportaciones de productos hospedantes.