Desde luego, ahora lo entiende. Aprecia la forma en que ha dejado recuerdos perdurables para numerosas familias. Sabe lo que es haberse conectado con una comunidad.
E incluso está contento por el hecho de que haya tantos perros llamados Buster o Posey en el área de la Bahía de San Francisco.
Posey dio un emotivo adiós al béisbol, tras una destacada carrera de 12 años con los Gigantes, en la que ganó tres títulos de la Serie Mundial y guio a innumerables lanzadores destacados.
Parte del motivo por el que se retira a los 34 años, tras una de sus mejores temporadas, es que quiere pasar más tiempo con sus cuatro hijos. Y sin duda estará ocupado.
Posey decidió no disputar la campaña de 2020, abreviada por el coronavirus, después de que él y su esposa Kristen adoptaron a unas bebés nacidas en forma prematura. Tenían ya a dos mellizas mayores, Addison y Lee.