En su editorial del semanario “Desde la Fe”, la iglesia católica recordó que la brecha y división llegó a uno de sus puntos más álgidos el pasado 30 de agosto, cuando una alcaldesa electa resultó lesionada durante una trifulca con policías cuando intentaba, junto a otros compañeros, ingresar al Congreso local.
Situación que hizo creer que las diferencias entre los distintos grupos políticos eran insalvables, sin embargo, prevaleció la razón y, al menos de momento, el conflicto se desahogó por la vía del diálogo y el respeto.
Por ello, la iglesia católica recordó que, en enero del 2020, el Papa Francisco, en un discurso ante los miembros del Cuerpo Diplomático acreditado ante la Santa Sede, alertó de los peligros de la polarización.
“Las polarizaciones, cada vez más fuertes, no ayudan a resolver los auténticos y urgentes problemas de los ciudadanos, sobre todo de los más pobres y vulnerables, y mucho menos lo logra la violencia, que por ningún motivo puede ser adoptada como instrumento para afrontar las cuestiones políticas y sociales”, dijo.
Mencionaron que los comicios electorales de 2021 se han convertido en el punto de partida rumbo a la gran elección de 2024, en la que se renovará la presidencia de la República y buena parte de las gubernaturas, incluida la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.
Por lo que pidieron al partido en el poder y a las fuerzas políticas de oposición comprender que la crisis sanitaria por el Covid-19, la inseguridad y la violencia, constituyen emergencias mayúsculas que sólo pueden ser enfrentadas en unidad, con generosidad y altura de miras, dejando de lado intereses partidistas y electorales.
“La división y el encono no pueden ser la hoja de ruta para superar las crisis. El camino es -y será siempre- el diálogo, poniendo por delante el bien común para encontrar soluciones a los graves problemas que enfrentamos como sociedad”, finalizan.