La oficina en México de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) llamó a esclarecer el asesinato del periodista Jacinto Romero Flores, ocurrido en Ixtaczoquitlán, Veracruz, y romper “con el ciclo de impunidad, un ciclo que mata y genera temor” entre el gremio periodístico.
A través su representante adjunto, Jesús Peña Palacios, el organismo resaltó que en lo que va de 2021 han sido ejecutados seis periodistas y dos más están desaparecidos, “agresiones posiblemente vinculadas al ejercicio de la actividad periodística”, que se suman a otros siete homicidios perpetrados durante 2020.
Tras recordar que Romero recibió amenazas con anterioridad, Peña Palacios consideró que con su asesinato –el pasado jueves 19-- se pone en evidencia el “contexto de vulnerabilidad y riesgo en que se ven orillados a desarrollar su trabajo muchos periodistas en México”.
En una democracia, “informar, opinar o criticar debería ser un trabajo normal (…) y no una actividad de riesgo”, por lo que, “cuando quienes usan los micrófonos enfrentan las balas, toda la sociedad pierde”, abundó Peña Palacios.
Insistió que en la investigación del homicidio de Romero deben considerarse todas las líneas de investigación, incluida la posible vinculación con su actividad periodística, las amenazas y el contexto de violencia en la zona, y exigió que el caso no se convierta en “un simple número, una cifra más”, como lo pidió su familia.
“Es necesario que haya una investigación exhaustiva que rompa con el ciclo de la impunidad, un ciclo que mata y genera temor. Esclarecer este asesinato y todos los homicidios de periodistas que pagaron con sus vidas el haber informado, es la única manera de garantizar a familiares, amistades, colegas y a la sociedad en su conjunto que la libertad de expresión será garantizada frente a quienes creen tener el poder para decidir lo que debemos decir y lo que podemos escuchar”, resaltó el representante de la ONU-DH.
El organismo internacional recordó que Jacinto Romero, colaborador de la radiodifusora Ori Stereo, “era un periodista muy conocido en su municipio y en la zona de la sierra de Zongolica, donde junto a su actividad periodística promovía acciones solidarias hacia las personas en situación de vulnerabilidad”.
Destacó que Romero había sido amenazado en febrero de 2021, por lo que recibió medidas de protección por parte de la Comisión Estatal para la Atención de Protección a Periodistas (CEAPP) de Veracruz, y ayer, mientras se desplazaba en un vehículo rotulado con la palabra prensa –abundó--, fue atacado con armas de grueso calibre de forma directa.
La ONU-DH expresó sus “condolencias y solidaridad con la familia, colegas y amistades de Jacinto Romero Flores”.