Tres frutas que deben evitar personas con diabetes

La diabetes es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo

  • CIUDAD DE MÉXICO

Según la Organización Mundial de la Salud, esta condición se presenta cuando el páncreas no produce suficiente insulina o cuando el cuerpo no la utiliza eficazmente. Existen varios tipos de diabetes, entre los que se incluyen la tipo 1, la tipo 2 y la gestacional.

La diabetes es una condición de salud que requiere una atención especial a la alimentación y al control de los niveles de azúcar en sangre. Si tienes diabetes, es esencial ser consciente de los alimentos que consumís y esto incluye prestar atención a las frutas, ya que lo que es bueno para unos, no es necesariamente lo mejor para otros.

Aunque las frutas son una parte importante de una dieta equilibrada, el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas, asegura que algunas de ellas deben ser consumidas con precaución si padeces esta enfermedad, debido a su alto contenido de azúcares naturales.

Frutas que los diabéticos deben consumir con moderación

Mangos: Los mangos son deliciosos, pero contienen una cantidad significativa de azúcar. Esto es especialmente relevante para las personas con diabetes gestacional, ya que durante el embarazo, los altos niveles de glucosa en sangre pueden ser riesgosos.

Cerezas: En su forma natural son relativamente bajas en azúcares, pero cuando se consumen en almíbar o en productos endulzados, pueden aportar una cantidad considerable de azúcar y calorías. Es importante controlar el tipo de cerezas que consumes.

Plátanos: Los plátanos, especialmente cuando están maduros, contienen almidones que se convierten en azúcar a medida que maduran. Para las personas con diabetes, consumirlos en un estado intermedio de madurez puede ser una opción más segura.

La clave para las personas con diabetes es la moderación y el monitoreo constante de los niveles de azúcar en sangre. Es importante consultar con un profesional de la salud o un dietista para desarrollar un plan de alimentación adecuado que se adapte a tus necesidades individuales. Además, incorporar una variedad de frutas y verduras, junto con una alimentación equilibrada y controlada, puede ayudarte a mantener niveles de azúcar en sangre estables y una salud óptima.