CIUDAD DE MÉXICO.-El Gobierno federal calculó expectativas irreales de producción petrolera, que al final del sexenio serán un riesgo para las finanzas del País, consideró el diputado del PAN Mario Riestra.
Integrante de la comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, indicó que la secretaria de Energía, Rocío Nahle, nunca fue capaz de generar cifras reales sobre la producción petrolera del País.
REFORMA publicó este sábado que la Secretaría de Energía estima que la producción de Petróleos Mexicanos sea de un millón 571 mil barriles de petróleo diarios, lo que es un millón de barriles menos que la meta establecida al arranque del actual Gobierno, y que después ajustó en dos millones.
Aunado a ello, Pemex es la empresa petrolera más endeudada del mundo y opera por debajo de estándares internacionales.
"El problema también se convertirá en un escollo financiero. Las erróneas expectativas en materia de producción petrolera mermarán los ingresos esperados.
"Por el otro frente, Pemex demandará cada vez más recursos para sanear su endeudamiento. Ello limitará el de por sí estrecho margen de actuación en las finanzas públicas mexicanas. Advertimos un verdadero riesgo de fin de sexenio", manifestó el legislador de Puebla.
Riestra manifestó que las estimaciones de producción petrolera de la secretaria Rocío Nahle no tienen sustento alguno.
"Son absolutamente poco realistas y así lo han sido desde que arrancó el sexenio", manifestó.
Recordó que que cuando se dio el gran acuerdo que impulsaban la OPEP y Estados Unidos para contener los altos precios del petróleo durante la pandemia de Covid-19, en aquella ocasión, México se negó a recortar la producción petrolera.
"Lo increíble es que las cifras que planteó Rocío Nahle nunca se alcanzaron.
"El declive en la producción petrolera es algo que no quiere ver esta Administración y, ante la negación de la realidad, no han podido revertir la situación", criticó.
Citó que lamentablemente Pemex es la empresa petrolera más endeudada del mundo y no ha sabido hacerse de la tecnología suficiente para perforar y aprovechar los yacimientos existentes, lo que, estimó, complicará aún más su recuperación financiera y la posibilidad de aumentar la producción de petróleo.