La Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús confirmó la identificación de los cuerpos de los sacerdotes Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar, asesinados el lunes en su parroquia de Cerocahui, Chihuahua, junto con el guía de turistas Fernando Palma, y se reconoció privilegiada en un país con más de 100 mil desaparecidos, para quienes pidió justicia.
"Somos conscientes de que, en un país con más de 100 mil personas desaparecidas, el hallazgo de nuestros hermanos a 72 horas de desaparición tras una búsqueda coordinada por los tres niveles de gobierno refleja una atención intensa", indicaron los jesuitas.
"No podemos dejar de señalar que esta acción es poco accesible a la inmensa mayoría de familias cuyos casos no concitan la atención pública. La memoria de nuestros hermanos nos obliga a seguir trayendo a la luz esa realidad", añadieron en un comunicado.
La Compañía de Jesús también pidió que continúe la búsqueda de cuatro personas, incluido un menor, que habrían sido secuestradas el pasado lunes por el grupo criminal encabezado por José Portillo Gil, alias "El Chueco", que persiguió a Fernando Palma hasta la parroquia de Cerocahui donde ultimó además a los sacerdotes.
"Dado que se ha hecho público que lo sucedido el lunes 22 de junio en Cerocahui podría haber otras víctimas de desaparición, llamamos a que la búsqueda continúe. Pedimos garantizar la seguridad para la comunidad de Cerocahui y a diseñar un programa integral de rescate para regiones lastimadas por la violencia como la Sierra Tarahumara", indicaron.
La Compañía de Jesús añadió que continuará sus labores con los jesuitas de la Tarahumara y acudirá a Cerocahui a refrendar su compromiso con la comunidad y que informarán sobre la exequias de los sacerdotes pues saben que muchos quisieran acompañarlas para demostrar así su rechazo a la violencia que lastima al País.