Tres limoneros fueron asesinados en medio de una serie de ataques armados perpetrados por presuntos integrantes del crimen organizado esta mañana en el Municipio de Tepalcatepec, Michoacán.
HECHOSFuentes policiacas indican que los cortadores de limón se encontraban trabajando en la Localidad de Las Juntas cuando los supuestos criminales los mataron a tiros.
- Reportes preliminares adjudicaron el crimen a miembros del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), que junto con Los Viagras, el Cártel de Tepalcatepec, Los Tena y Los Blancos de Troya, exprimen con sus cuotas a las empacadoras de la región de Tierra Caliente en la entidad.
Reportes preliminares señalan que uno de los ataques registrados este lunes en Tepalcatepec ocurrió en uno de los accesos a la cabecera municipal, frenados por policías municipales con ayuda de militares.
También se reportaron ataques en Las Juntas, donde fueron encontrados los cuerpos maniatados de los trabajadores.
Habitantes del poblado de Los Bancos, en el Municipio Parácuaro, reportaron el pasado sábado el hallazgo del cuerpo de un hombre tendido en una huerta de limones, cerca del "Camino al Aguate".
La víctima, identificada como Jorge Alejandro, presentó lesiones de proyectil de arma de fuego. Sin embargo, hasta el momento se desconoce si se trataba de un limonero.
Los homicidios de este día sucedieron apenas unos días después de que seis de los siete principales municipios productores de limón en la entidad retomaran sus actividades tras un mes de paro.
Aunque el Gobernador morenista Alfredo Ramírez Bedolla aseguró el pasado 31 de agosto que la problemática solo afecta al Municipio de Apatzingán. "Los otros 7, 8 municipios están haciendo el corte normal", afirmó.
"Se está llevando de manera normal el corte de limón en prácticamente el 90 por ciento de los municipios productores de limón. No tenemos riesgo de desabasto y sí estamos atendiendo también el tema directamente en Apatzingán", reiteró.
Las extorsiones contra los productores llegar hasta los tres pesos por kilo de limón para que puedan trabajar en paz, pero si se niegan son atacados con explosivos lanzados con drones.
Sin embargo, los cortadores y los empacadores también la pagan con secuestros y la quema de sus vehículos.