Ciudad de México.- Por su ubicación geográfica, México es un país altamente expuesto a huracanes, inundaciones y otros eventos catastróficos, pero cifras de la industria aseguradora estiman que sólo 6.5 por ciento de las viviendas y 18 por ciento de las empresas tienen un seguro, por lo que se requiere una mayor protección, refirió Eikos, grupo mexicano asesor de administración de riesgos.
Sólo en 2023, México registró la temporada de huracanes más intensa de los últimos 50 años; la Comisión Nacional del Agua (Conagua) reportó cinco huracanes, en los que destaca Otis en Acapulco, dimensionó la firma.
Aunque hubo un ligero incremento en las solicitudes de seguros de daños después del impacto del huracán Otis, cerca del 80 por ciento de las pólizas de daños no cuenta con cobertura por fenómenos hidrometeorológicos, dijo por separado Santiago Fernández, vicepresidente de Autos y Daños en AXA México.
En esta cobertura se indemnizan los daños causados por los eventos naturales relacionados con el agua como granizadas, heladas, huracanes, inundaciones, entre otros.
"Es importante que las familias y las empresas cuenten con mecanismos de protección financiera, como el seguro, que les ayude a enfrentar las consecuencias económicas de estas catástrofes", comentó Eduardo Gutiérrez, socio de Eikos y asesor de administración de riesgos.
Swiss Re Institute estimó que las pérdidas aseguradas por catástrofes naturales superarán los 135 mil millones de dólares en 2024 a nivel global.
Tan sólo el huracán Helene y el huracán Milton que dejaron afectaciones graves en Estados Unidos provocaron pérdidas aseguradas estimadas cercanas a los 50 mil millones de dólares.
El calentamiento global favorece la aparición de muchas de las catástrofes naturales observadas, y este 2024 se convertirá en el año más caluroso jamás registrado, destacó Swiss Re en un reporte el pasado 5 de diciembre.
"Estados Unidos se ha visto afectado por dos grandes huracanes y una alta frecuencia de tormentas eléctricas severas, lo que supone al menos dos tercios de las pérdidas aseguradas globales de 2024, de más de 135 mil millones de dólares según las estimaciones actuales", indicó.
Por quinto año consecutivo, las pérdidas aseguradas por catástrofes naturales superan la barrera de los 100 mil millones de dólares, dimensionó Balz Grollimund, Head Catastrophe Perils de Swiss Re.