Ciudad de México.- Comuneros de San Miguel Xaltocan en esta población aledaña al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) bloquearon las vías férreas y montaron un campamento frente al lugar donde pernoctan los trabajadores de las empresas constructoras encargadas de las obras.
Ello, en protesta por la construcción de un muro perimetral entre el aeropuerto y la comunidad, que, según los pobladores, invade una zona escolar.
Asimismo, los comuneros denunciaron que durante la madrugada de este viernes fueron agredidos por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), así como obreros del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), sin que la dependencia federal a cargo de las obras se pronuncie sobre lo ocurrido.
Incluso, desde la noche del jueves, pobladores tomaron maderas, utilizadas en los trabajos, para armar dos barricadas sobre las vías del ferrocarril y posteriormente, les prendieron fuego.
Algunos de los inconformes señalaron que su intención no es invadir los terrenos del aeropuerto, sino que se cumplan los acuerdos que establecen los límites de construcción marcados por representantes del gobierno federal y por los propios pobladores de la zona.
El altercado ocurrió, según los vecinos, alrededor de las 03:00 horas, cerca de uno de los accesos a la nueva terminal aérea y la escultura del general Felipe Ángeles, en donde, pese a la disputa, los vecinos continuaron hasta el amanecer aun con la presencia de elementos de la Policía Militar y efectivos antimotines.
"El pueblo les regaló más de mil millones de pesos en tierras para su aeropuerto a cambio de infraestructura. Su gobierno no nos va a regalar nada, es algo a cambio de lo mucho que le dimos. Ya inauguraron su aeropuerto y Xaltocan no ha inaugurado nada", manifestaron.
El 10 de marzo de 2019, los comuneros acordaron ceder sus tierras para la construcción del AIFA a cambio de mejoras para la población, obras de infraestructura, drenaje, agua potable y la creación de empleos para sus habitantes; sin embargo, esto no se ha cumplido, aseguran los ejidatarios.