Ciudad de México
A casi tres meses de su despegue y apenas con una veintena de vuelos comerciales, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) en el Estado de México, sigue sin ser una válvula de escape para aliviar la carga del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México que a estas fechas recibe 900 vuelos diarios y alrededor de 50 millones de pasajeros anuales. El objetivo de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes de la actual Administración es conseguir que al menos un 15% de las operaciones del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM) se trasladen al nuevo aeródromo al cierre de 2022, una mudanza que se traducirá en la operación de 110 vuelos y unas 200 operaciones en diciembre próximo, asegura el subsecretario de Transportes, Rogelio Jiménez Pons.