Uno de los principales activos para evitar la pérdida de su patrimonio es tener un seguro de gastos médicos mayores, pero es necesario contar con asesoría previa para evitar sorpresas por el rechazo de pagos en la cobertura por falta de prevención.
Alejandro García López, director de Abogados de Seguros, bufete de alta especialidad en primas, advirtió que los seguros de gastos médicos han sido una herramienta eficaz para proteger y cuidar la economía familiar ante imprevistos.
"Pero también hay que prevenir la eventualidad de que las aseguradoras rechacen la cobertura de un siniestro ante una falta de asesoría", indicó.
"Es importante entender que la aseguradora calcula su cobertura y costos, considerando que estamos sanos, y por ello rechazan los pagos cuando existen padecimientos que los clientes ya sabían que padecen o saben que aparecerán, o bien, resurgirán, a menos que informen a la aseguradora al momento de contratar la póliza y ella acepte el riesgo".
Cuando hay un padecimiento previo, la aseguradora podría aceptar el riesgo, afirmó el experto, pero al contratar el seguro, el asegurado debe tener en cuenta que eso podría elevar considerablemente el costo de la prima.
"En esta misma lógica, otra causa de rechazo es cuando debido a alguna de nuestras actividades tenemos altas probabilidades de accidentarnos".
El desconocimiento de estos riesgos al adquirir primas de seguros, agregó, ha provocado un aumento en quejas y reclamaciones por seguros de gastos médicos y todo por falta de asesoría experta.
De acuerdo con la Condusef, las quejas y reclamaciones a aseguradoras por pólizas de gastos médicos mayores aumentaron 28.2 por ciento en el 2022 y la negativa del pago de la indemnización del seguro tuvo un incremento anual de 36.6 por ciento.
"Estos rechazos pueden deberse a conceptos como ´preexistencia´, que son enfermedades o padecimientos que el beneficiario tenía antes de contratar su seguro de gastos médicos, y consecuentemente no los cubre el seguro", añadió.
"Otro de los conceptos que los clientes deben conocer para evitar reclamaciones y rechazos de sus seguros son las ´exclusiones´, que son las enfermedades o tratamientos que la aseguradora no cubre".
Entre los ejemplos de éstos, García López detalló padecimientos congénitos, cirugías estéticas, tratamientos homeopáticos o de medicinas alternativas, estudios psiquiátricos y accidentes o enfermedades provocados por consumo de drogas o alcohol.
Gran parte de estas inconformidades se puede evitar si los clientes son asesorados de manera correcta por agentes de seguros experimentados.
El abogado alertó que la aseguradora tiene derecho a investigar si la información que le ofreció el contratante es verdadera, y en el caso de detectar alguna inconsistencia, puede rescindir el contrato de seguro y en consecuencia la póliza.
En ese caso no tendrá obligación de pagar ninguna indemnización.