El líder nacional del PAN, Marko Cortés, destacó la elección de la nueva presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Lucía Piña Hernández, y confió en que los próximos cuatro años serán de un auténtico equilibrio de poderes y de una absoluta defensa de la Constitución porque no cederá ante las presiones del presidente Andrés Manuel López Obrador.
"Para nadie es un secreto que en los últimos años el máximo tribunal de justicia de nuestro país y el Poder Judicial en su conjunto han vivido un acoso permanente del Presidente de la República. Confiamos en que la nueva Presidencia no cederá ante las presiones que, sin duda, no serán pocas", dijo Cortés.
El líder de Acción Nacional reiteró su confianza en que la nueva presidenta de la Corte devolverá a esta institución el profesionalismo, la imparcialidad, ecuanimidad y neutralidad política que debe tener.
"Cualquier indicio, de lo contrario, será señalado por Acción Nacional. No obstante, las y los ministros también tendrán en el PAN un aliado para hacer eco de las denuncias que hagan ante cualquier tipo de presión. Nada ni nadie puede estar por encima de la ley", enfatizó.
Además de desearle éxito en su nueva encomienda, Marko Cortés confió en que la Piña Hernández asegurará de que en ningún caso los actos del Estado vulnerarán los derechos consagrados en la Constitución, y que mediará en los conflictos que puedan surgir entre los Poderes.
"Hoy, como nunca antes, México necesita de una Suprema Corte de Justicia fuerte, independiente y autónoma, que no ceda ante las presiones o coqueteos del oficialismo, que sea un contrapeso frente al Ejecutivo y que actúe con oportunidad para evitar cualquier tipo de violación de derechos y garantías. Hoy debemos unirnos todos para poner un freno al autoritarismo", declaró.
Cortés confió que la nueva presidencia de la SCJN no tolerará la ambición inconstitucional de López Obrador de controlar al Poder Judicial de la Federación y que en contraste de quien concluye, la ministra presidenta recién nombrada sabrá mantener la sana distancia y la constitucional independencia que debe existir entre los Poderes de la Unión.