CIUDAD DE MÉXICO
En el albergue Casa de Vida Camino a la Fortaleza, en Tonalá, una niña de 11 años de edad fue rociada con alcohol, quemada y recibió una descarga eléctrica con una pistola Taser, lo cual le provocó quemaduras en el tórax, un brazo y el abdomen.
Mónica, madre de la menor de edad, contó a El Informador que su hija ingresó al centro el 30 de junio anterior, debido a una ansiedad severa y ataques epilépticos que presentaba.
Según su versión, la niña fue rociada con alcohol y quemada el viernes 22 de julio, pero a ella el propietario del centro le notificó hasta el sábado.
- La víctima tuvo quemaduras de segundo grado en el 13 por ciento de su cuerpo, principalmente en el tórax, brazo izquierdo y abdomen.
De inmediato, la niña fue sacada del lugar e internada en la clínica 89 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), donde tuvo que ser intervenida quirúrgicamente y se espera una segunda operación el 28 de julio.