GUADALAJARA, Jalisco.- A 18 días de no tener ni una sola pista del paradero de Carlos Antonio Hernández Orozco, un grupo de familiares se reunió ayer para marchar y exigir su localización.
Lo último que supieron sobre el joven de 24 años es que iría a una supuesta entrevista de trabajo, para la cual lo citaron afuera de la Nueva Central de Autobuses, un punto por el que solía transitar en su ruta a casa.
La familia se congregó alrededor de las 10:00 horas en la Glorieta de los Niños Héroes, también conocida como Glorieta de las y los Desaparecidos, para marchar a Casa Jalisco.
"Carlos, tu familia te espera y pide tu regreso a casa", se leía en una de las cartulinas.
Luego de casi una hora de camino, los familiares empezaron a poner copias de la ficha de búsqueda en las vallas que el Gobierno del Estado coloca afuera de la residencia oficial del Gobernador cuando manifestaciones.
- El 6 de agosto, el ex estudiante de la UdeG estuvo en contacto con sus parientes; les dijo que la persona que lo quería contratar le mandó un taxi para recogerlo en la central, y que su destino era Tala, pero el rastro se perdió en La Venta del Astillero, Zapopan.
El colectivo Luz de Esperanza se reunió este fin de semana para pegar fichas de personas desaparecidas.
Esta vez acudieron al edificio de la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas, ubicado en la Calzada Independencia y Sierra Nevada, en la Colonia La Perla, donde "tapizaron" de imágenes la entrada.
Héctor Flores, representante de la agrupación, sostuvo que estuvieron en el lugar alrededor de tres horas.
En el marco de las actividades de Luz de Esperanza -que incluyen tanto la colocación de fichas en bolardos y otros puntos del Centro Histórico, así como el cierre de vialidades- el colectivo y las autoridades han tenido algunos roces.