En las últimas horas, con 476 votos a favor y ninguno en contra, la Cámara de Diputados aprobó la denominada Ley Silla, una reforma cuyo fin es mejorar las condiciones laborales de los trabajadores en México. Esta legislación aborda problemáticas que la Ley Federal del Trabajo no ha logrado resolver de manera efectiva en los últimos años, promoviendo cambios significativos en la relación entre empleados y empleadores.
La Ley Silla tiene como objetivo principal establecer que los empleadores deben proporcionar sillas o asientos con respaldo a todos los trabajadores, tanto durante la ejecución de sus tareas como en sus periodos de descanso, sin excepciones. Este cambio busca aliviar las condiciones laborales de quienes, debido a la naturaleza de sus funciones, permanecen de pie durante largos periodos de tiempo. De igual manera, se prohíbe que los patrones impidan a sus empleados tomar asiento de manera periódica a lo largo de la jornada laboral.
Con esta reforma, se pretende no solo salvaguardar la salud y bienestar de los trabajadores, sino también crear un entorno laboral más seguro y eficiente. El uso de mobiliario adecuado es clave para garantizar un espacio de trabajo que promueva tanto la productividad como la prevención de riesgos.
¿Cuándo entra en vigor la Ley Silla?La ley entrará en vigor 180 días después de su publicación, y las empresas contarán con un periodo de 12 meses para ajustar sus reglamentos internos y adecuar sus instalaciones a las nuevas disposiciones. En caso de incumplimiento, las sanciones económicas serán considerables, con multas que oscilarán entre los 25,000 y 250,000 pesos mexicanos, y de no cumplir se ordenará el cierre temporal de actividades.
Con la implementación de esta reforma, se espera un avance significativo en la protección de los derechos laborales, contribuyendo al desarrollo de un entorno de trabajo más digno y saludable para los empleados en todo el país.