Hallan fósil de arañas de 23 millones de años en Chiapas

Un par de arañas incrustadas en ámbar, con una antigüedad de 23 millones de años, únicas el mundo, fueron halladas en las minas de Simojovel de Allende, en Chiapas

Tuxtla Gutiérrez, México

Un par de arañas incrustadas en ámbar, con una antigüedad de 23 millones de años, únicas el mundo, fueron halladas en las minas de Simojovel de Allende, en Chiapas.

 Se trata de una hembra y un macho que miden casi cuatro milímetros, están pegadas, y a su alrededor hay restos de telaraña.

La pareja de arácnidos fue puesta en exposición en el Museo de Paleontología Estatal

Miguel Ángel García Villafuerte, especialista de la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural de Chiapas, dijo que el hallazgo se registró cuando investigadores realizaban una exploración en la mina de ámbar, en Los Pocitos, al norte del Estado.

 "Este hallazgo es importante, es el único representante a nivel nacional en todos los depósitos de ámbar en el mundo. Hay ámbar en el continente americano, en el Mar Báltico (Europa), África, y Rusia, pero aquí está el único género en el mundo", agregó.

En ocasiones se encuentran pedazos o les falta una extremidad a las especies halladas, pero las arañas encontradas en Chiapas están bien preservadas, señaló García Villafuerte.

 Para obtener la información de este fósil, el investigador mostró una réplica del espécimen en el que se basaron, y en el que notaron que estos insectos fosilizados tienen los organismos reproductores muy grandes.

{"quote":" \"Acá en Chiapas encontramos el primer registro y único del género. La especie es única, en el ese sentido a nivel geográfico también es importante porque son organismos fosilizados que viven en la actualidad y eso nos ayuda a otro tipo de investigación\", explicó el experto."}, .

 Agregó que, desde un punto de vista ecológico, también es importante debido a que las arañas siguen siendo depredadores naturales.

  •  La especie fue bautizada con el nombre de Thymothys Carbotti, en honor al último apellido del biólogo chiapaneco, Gerardo Carbot Chanona, quien ha dedicado los últimos 20 años de su vida a la investigación de piezas fósiles halladas en Chiapas.