La enseñanza sobre sexualidad debe centrarse en atender problemáticas como el embarazo adolescente, las enfermedades de transmisión sexual, el consenso de la pareja, en vez de un ejercicio explícito, que, consideraron, no abona a la educación.
"No había observado un formato de contenido tan absurdo y arriesgado en primaria. Yo creo que hay cosas más importantes que simular una eyaculación, eso sólo va a fomentar el morbo y los alumnos se van a reír", consideró un docente de la Ciudad de México.Luis Manríquez, de 14, obtuvo medalla de plata.