- CIUDAD DE MÉXICO
Este viernes, después de 856 días de la desaparición de la docente, el Juez Ariel Montoya Romero consideró que existen pruebas suficientes para acreditar la responsabilidad del joven por este delito considerado como grave.
Verónica Villaseñor Ferreyra, madre de Jessica, acudió a la audiencia con un mandil azul en sus manos, el que su hija llevaba a sus clases.Al escuchar el fallo a favor, rompió en llanto y pidió ayuda para continuar con su lucha, al afirmar que esto sólo fue un paso más, pues falta que se dicte sentencia.
Al ser abordada por periodistas, resaltó que se ha pedido a las autoridades de justicia que impongan la pena máxima y ejemplar, ya que incluso el juez reprobó el nivel de violencia observado en el asesinato de la joven, que este año cumpliría 24 años.
"Ya lo comprobamos, las más de 100 pruebas. Ahora, sí es el asesino de mi hija y más que demostrada la crueldad con la que la trató. La pena máxima ni siquiera sería suficiente a la crueldad con que la trató, pero es lo mínimo que vamos a obtener de eso".
Ante el juez, se narró que Diego Urik Mañón Melgoza, quien en ese entonces tenía 18 años, pasó por ella el 21 de septiembre de 2020, la agredió sexualmente, asesinó y arrastró hasta el bosque en la zona sur de Morelia.
Su cuerpo fue hallado el 25 de septiembre de ese año con al menos 31 golpes.
El señalado pidió ayuda a sus amigos para esconder el cuerpo, pero ellos se negaron. Sin embargo, su familia sí lo apoyó y logró huir hasta Jalisco, donde fue capturado el 30 de septiembre de 2020.Familia de Diego aún no lo cree A la audiencia acudieron familiares de Diego Urik, quienes pugnaron por su libertad con una férrea defensa jurídica.
Según activistas, el ahora declarado culpable ha contado con al menos 10 abogados que han buscado prolongar el juicio para ganar tiempo y planear estrategias.
La mamá de Jessica informó que el próximo 3 de febrero se dictará sentencia y reprobó que los padres solapen la conducta feminicida.
"Es más que eminente toda la batalla y todo este tiempo y el ver la cara de sus papás que siguen sin creerlo, cuando ellos tuvieron las mismas pruebas que yo he tenido en las manos", apuntó.
Asimismo, solicitó la protección de las autoridades al afirmar que la familia del inculpado tiene recursos económicos suficientes para accionar y teme alguna venganza.
"¡Se logró, se logró, pinche Diego sí cayó!", gritaron feministas, quienes al ver salir a los abogados y a la familia del acusado, les aventaron jitomates al considerar que han buscado obstruir la justicia.