La propuesta de paz en Ucrania que lanzó el presidente López Obrador no tuvo eco en la ONU. De hecho, cuando Marcelo Ebrard viajó a Nueva York no estaba “afinada” ni se había consultado previamente con las partes involucradas. Incluso, el canciller ya ni siquiera mencionó en sus discursos la otra idea en la que el mandatario mexicano había insistido: una tregua a la guerra durante cinco años en todo el planeta.
CIUDAD DE MÉXICO
El canciller Marcelo Ebrard Casaubon llevó ante la ONU la propuesta de paz para Ucrania, del presidente Andrés Manuel López Obrador, que no estaba del todo “afinada”, cambió de nombre tres veces en dos días, no se había negociado anteriormente y no recibió eco fuera de México.
La propuesta que Ebrard presentó el jueves 22, primero ante el Consejo de Seguridad y posteriormente en la 77 Asamblea General de la ONU, pretende instaurar un nuevo canal diplomático mediante el cual Ucrania y Rusia reencuentren la “confianza perdida”, con la intermediación del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, del papa Francisco y del primer ministro de la India, Narendra Modi.
Durante sus dos discursos en la sede de la ONU, Ebrard ni evocó la otra idea de López Obrador, que consistía en exhortar a Estados Unidos, China y Rusia a que encuentren un acuerdo para instaurar una tregua de cinco años en el planeta.
Cuando el canciller viajó a Nueva York, el miércoles 21, no tenía una propuesta definitiva sobre Ucrania. Consultado al respecto horas antes del viaje, el equipo de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) indicó a Proceso que el plan “se está terminando de afinar”. Días antes, desde Londres, Ebrard había declarado que el gobierno mexicano aún no había enviado la iniciativa a los gobiernos de Ucrania y Rusia porque quería “hablar con ellos antes”.
La Cancillería dijo a este semanario que el lunes 12 la delegación de México ante la ONU –a cargo de De la Fuente– mandó cartas diplomáticas a las misiones permanentes de la India, la Santa Sede, Ucrania y Rusia en Nueva York, para avisarles que el presidente mexicano consideraba un plan de paz bajo el liderazgo del secretario general.
Sin embargo, la propia SRE advirtió el día de la llegada de Ebrard a Nueva York, que el canciller presentaría primero el plan a la ONU y luego lo cabildearía con las representaciones diplomáticas de los países partes.
Al cierre de esta edición, ningún gobierno se había pronunciado sobre la propuesta mexicana. En el artículo publicado el viernes 23, se resaltó que México está “totalmente consciente que la precondición para el éxito de cualquier esfuerzo de mediación es la voluntad política de las partes y estamos conscientes que las tensiones siguen aumentando. Hasta el momento, aunque con prudencia, todas las partes han expresado su interés en conocer más detalles sobre esta propuesta”.
Silencio- En la mañana del jueves 22, Ebrard presentó formalmente el plan ante el Consejo de Seguridad de la ONU: le dedicó el último minuto de su intervención, y permaneció vago en cuanto a sus detalles. Expresó que, “de ser posible”, participarán Modi y el papa Francisco, y que en el futuro la delegación mexicana “proseguirá con las consultas necesarias” para conseguir el apoyo que permita crear el comité.