En un esfuerzo por preservar el ecosistema y brindar apoyo a la mariposa monarca durante su migración anual, seis comunidades de San Felipe del Progreso, en el Estado de México, han implementado jardines polinizadores.
Este proyecto, liderado por los comisariados ejidales y respaldado por el DIF municipal, busca no solo beneficios agrícolas, sino también proporcionar un hábitat estable para estos insectos que recorren miles de kilómetros hasta los bosques mexiquenses y michoacanos.
Para atraer y sustentar a los polinizadores, especialmente a la mariposa monarca, seleccionaron diversas plantas nativas de México que ofrecen néctar y que actualmente sirven como hospederas.
Entre las especies destacadas se encuentran el algodoncillo (Asclepias curassavica), que es una especie esencial para la reproducción de la mariposa monarca, ya que sus larvas se alimentan unica y exclusivamente de ella.
Tepozán blanco (Buddleja cordata) que es un arbusto que proporciona abundante néctar, atrayendo a diversas especies de mariposas y abejas. Tejocote (Crataegus mexicana): Además de sus frutos comestibles, sus flores son una fuente de alimento para los polinizadores, sombrero mexicano y mirto, entre muchas otras más.
Estas plantas no solo embellecen el paisaje, sino que también desempeñan un papel crucial en la conservación de las poblaciones de polinizadores, trayendo también beneficios agrícolas en esta región.
De acuerdo con los comisariados ejidales, entre los múltiples beneficios se encuentran proporcionar la hábitats esenciales para polinizadores en declive, como la mariposa monarca, cuya población ha experimentado disminuciones significativas en los últimos años.
Así mismo, se buscará aumentar la presencia de polinizadores, se mejorará la fertilización de cultivos, incrementando la productividad y calidad de las cosechas.
Según datos de la temporada 2023-2024, las colonias de mariposas monarca en México ocuparon apenas 0.9 hectáreas, representando una disminución del 59% en comparación con el año anterior.
Esta cifra es la segunda más baja registrada desde 1993, sólo superada por las 0.68 hectáreas observadas en 2013-2014. La población más alta se registró en 1996-1997, con 18.21 hectáreas ocupadas.
Esta drástica reducción resalta la urgencia de iniciativas de educación ambiental, como estos jardines, que buscarán mitigar las amenazas que enfrentan las mariposas monarca, incluyendo la pérdida de su hábitat, el cambio climático y tambien el uso de pesticidas.
Cabe señalar que en el municipio vecino de San José del Rincón, el gobierno del Estado de México, y el gobierno Federal llevaron a cabo la construcción de al menos 204 espacios de este tipo, sin embargo, el comportamiento de estos insectos ha llevado a generar rutas más seguras y estables para su estancia. Un modelo que San Felipe del Progreso empleó para poder recibir a las mariposas o bien, ayudarlas en su tránsito migratorio.