El líder sindical Pedro Haces dejó su partido en manos de Gerardo Islas, un poblano de 38 años, quien pasó por el PAN, PRI y Nueva Alianza.
Desde antes de cumplir 18 años ya formaba parte de algunas empresas de medios de comunicación, y después se volvió accionista de dos compañías más.
Fue cercano al ex Gobernador panista Rafael Moreno Valle, quien lo nombró secretario de Desarrollo Social, puesto en el que repitió en la Administración de Antonio Gali Fayad.
Después participó en las coordinaciones de campaña de Eruviel Ávila, en el Estado de México; Marcos Covarrubias, en Baja California Sur; Ángel Aguirre, en Guerrero; Alejandro Moreno, en Campeche, y de Omar Fayad, en Hidalgo.
Incluso fue parte de las fundaciones Checo Pérez y Scholas del Papa.
Era diputado local por Nueva Alianza cuando Haces le pidió hacerse cargo de recopilar las firmas para lograr el registro de Fuerza por México.
En ese proceso, fue el partido al que más irregularidades en las firmas se le detectaron, pues aunque logró 352 mil 976 apoyos en tiempo récord, perdió 100 mil 795 por anomalías.
El INE también afirma que debe responder la secretaria general, Alma Lucía Arzaluz Alonso, de 46 años de edad, quien fue suplente de una senadora del PVEM, diputada local y federal, y secretaria de Medio Ambiente de Tlaxcala.
"La Secretaria General, Alma Lucía Arzaluz Alonso, como el Presidente del Partido, Ángel Gerardo Islas Maldonado, estaban obligados como miembros del Comité Ejecutivo Nacional del entonces partido Fuerza por México, a vigilar el uso adecuado de las prerrogativas que el INE otorga al partido político", advierte el INE.
El secretario de Administración y Finanzas, Enrique Gutiérrez Mondragón, ha trabajado en la iniciativa privada.
Hasta el pasado viernes, el INE no lograba ubicarlos, pues la autoridad electoral debe entregar personalmente la notificación en la que les pide devolver 33.9 millones de pesos que pagaron a proveedores sin autorización del interventor a cargo de la desaparición del partido, lo cual es un delito.
Algunas de esas empresas, advierte el organismo electoral, parecen ser compañías "fantasma".
En su corta vida como partido político --menos de un año--, FxM estuvo marcado por irregularidades en la aplicación de recursos públicos.
En el 2021, en su primera elección, fue el segundo partido más multado por anomalías en la campaña a diputados federales, superando a partidos con más antigüedad y financiamiento público.
Mientras Morena, que fue el partido con más anomalías, recibió 490 millones de pesos para gastos de campaña --además de sus prerrogativas para gasto ordinario--, Fuerza por México obtuvo 31 millones de pesos.
Al primero le aplicaron una multa por 373 millones de pesos, y al segundo 103 millones de pesos.
De acuerdo con el informe del INE, la principal irregularidad cometida por FxM fue no reportar en qué gastó el dinero, por lo que sólo por esa anomalía lo sancionaron con 53.3 millones de pesos.
El órgano electoral le aplicó además otra sanción por 18.3 millones por no entregar comprobantes de sus gastos.
Tampoco cumplió con su obligación de reportar al sistema de fiscalización sus eventos y operaciones financieras, y tuvo fallas en el reporte de ingresos y en la comprobación de éstos.
No informó cuánto invirtió o si le dieron en comodato inmuebles que utilizó como casas de campaña, y no entregó 40 por ciento de su financiamiento a candidatas.