Chiapas ha sido acechado por diversos casos de violencia debido a la disputa de dos grupos criminales, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa; la semana pasada asesinaron al sacerdote Marcelo Pérez.
Mayte explicó que la violencia en Chiapas no es más que la consecuencia del enorme descuido de décadas e incluso durante el gobierno de López Obrador. Señaló que la presidenta Claudia Sheinbaum ya debe presentarse en la entidad para evaluar lo que sucede.
"Se ha incrementado el desplazamiento, la pobreza, la violencia. Este silencio es hasta cómplice del gobierno federal", dijo la columnista.
Morquecho Escamilla coincidió que la violencia en Chiapas es un tema estructural, pues hay un historial de conflictos de muchas décadas, empezando por los temas de desplazamientos.
Detalló que las comunidades se encuentran bajo el control de los caciques, "grupos de poder local formado por indígenas que se establecieron y se hicieron del control social, territorial y de recursos. El investigador mencionó que, desde hace 3 años, el EZLN ha advertido que Chiapas está al borde de una guerra civil.
Respecto al crimen organizado en la entidad, reveló que el sacerdote Marcelo Pérez ya se encontraba amenazado desde hace 10 años.
"Yo escribí hace 10 años cómo se tenía en la mira a los agentes del pastoral y al padre Marcelo, ya se ofrecían por él 150 mil pesos", explicó.
Finalmente, la columnista concluyó que el crimen organizado se fortalece y que la estrategia de seguridad resulta tardía, por su parte el Director General de esta casa editorial indicó que es preferible dar el beneficio de la duda al gobierno actual.