Luego de un proceso de consulta de siete meses, el Gobierno publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación un decreto que reforma el Reglamento de la Ley General de Control del Tabaco.
Con ello se impedirá la exhibición de productos de tabaco, y sólo se permitirá que las tiendas desplieguen para consulta del público una lista con las marcas y precios disponibles.
Una reforma a dicha ley aprobada en febrero pasado prohíbe por completo la publicidad del cigarro.
Las cámaras de comercio sostienen que la exhibición del producto no es publicidad, por lo que el Reglamento seria inconstitucional, pues el Ejecutivo ira más allá de lo que autorizó el Congreso.
El Poder Judicial tendrá que aclarar este tema, ante los amparos que interpondrán tanto grandes cadenas comerciales, como pequeños comerciantes.
Según la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), los cigarros representan 25 por ciento de las ventas de los pequeños comerciantes, mientras que la Asociación Nacional de Abarroteros sostuvo que esconder el producto fomentará las ventas ilegales.
"De conformidad con la evidencia científica ampliamente documentada, la industria tabacalera aprovecha los puntos de venta para publicitar y promocionar sus productos e incluso es dirigida a los grupos más vulnerables, como niñas, niños y adolescentes, atraídos por sus colores y diseños vistosos, que aunado a la colocación estratégica de manera adyacente a dulces y golosinas, promueve la normalización del consumo, atrae a nuevos consumidores y dificulta a las personas que intentan dejar de fumar abandonar el consumo", argumentó la Ssa el pasado 20 de octubre, al rechazar los argumentos empresariales.
La dependencia incluyó una lista de 43 países que prohíben exhibir cigarros en los puntos de venta.
El Reglamento también eliminará las zonas de fumar en restaurantes, pues no se podrán servir alimentos ni bebidas en los espacios para fumadores, quienes serán enviados a sitios exclusivamente destinados a esa actividad.
Además, se prohibirán las acciones de responsabilidad social de las tabacaleras, por las que brindan apoyos en las zonas de producción de tabaco, al considerar que también es una forma de publicidad.