GUADALAJARA.-Hoy se cumplen 6 meses del caso de Luz Raquel Padilla Gutiérrez y, aunque la investigación continúa abierta, parece haberse congelado.
En el aire continúa la duda de si fue un feminicidio, como lo afirma su familia, o si fue una agresión de sí misma, como lo insinuó la Fiscalía del Estado.
Un problema añejo entre vecinos que, incluso, se habían denunciado mutuamente por violencia, originó todo.
El año pasado, Luz solicitó protección de Zapopan ante las presuntas agresiones de Sergio, su vecino, que el Municipio le brindó por dos meses, hasta que el 16 de julio se reportó que la mujer había ingresado a la Cruz Verde por las quemaduras que sufrió en un jardín de la Colonia Arcos de Zapopan. Las lesiones le provocaron la muerte días después.
El hecho causó revuelo cuando se hizo público que ella había denunciado violencia y que las autoridades no habían hecho lo suficiente para atender el problema, aunado a que se difundieron amenazas escritas en los muros del edificio donde ella y Sergio vivían.
El 20 de julio, el sospechoso se presentó a declarar voluntariamente, pero sólo quedó detenido por delitos contra la dignidad y lesiones.
Vecinos mostraron posturas encontradas sobre las personalidades de ambos. Unos dijeron que él era agresivo y que tenía problemas con más habitantes, y otros que ella tenía problemas mentales.
Bruno, hijo de 11 años de Luz, quedó a cargo de la hermana y la mamá, lo que trajo nuevas complicaciones para la familia. El niño padece autismo y epilepsia.
Cuarenta días después de la muerte, la Fiscalía presentó un peritaje que determinó que Luz hizo las pintas en los muros del edificio donde tenía su departamento.
También difundió que ella misma compró la botella de alcohol y el encendedor que se utilizaron en el incidente y que fueron encontrados en el jardín de los hechos.
El 30 de septiembre, el Alcalde Juan José Frangie propuso crear un fideicomiso hasta por un millón de pesos para la alimentación, vivienda, vestimenta, atención médica, terapias y la renta de la casa donde habitan la abuela y la tía de Bruno.
El mes pasado, Aurora, hermana de Luz, informó que el problema de salud del menor se había agravado, que necesita una cirugía y que el IMSS les ha impedido afiliarlo por cuestiones burocráticas. La institución le contestó que iba a revisar el tema y le pidió sus datos.
- Sergio ya se encuentra libre y hasta el momento la Fiscalía no ha dado informes sobre avances en el caso.