CIUDAD DE MÉXICO.-El Senado aprobó un exhorto propuesto por el panista Juan Pablo Adame para que en el proyecto de Presupuesto de 2024 se destine una partida suficiente de recursos para prevenir y combatir el cáncer.
El legislador panista, quien padece cáncer, ocupó la tribuna luego que el perredista Miguel Ángel Mancera solicitara licencia, por 24 horas, para permitir que presentara su iniciativa.
El testimonio que rindió provocó lágrimas de senadores y mensajes cargados de solidaridad ante la circunstancia de incertidumbre por la que atraviesa.
La propuesta mereció un respaldo inmediato, inclusive de Morena, y ahora se abre la interrogante de si la bancada mayoritaria en la Cámara de Diputados también la apoyará.
"Estoy aquí, dando una batalla por mi vida", dijo Adame desde tribuna después de haber rendido protesta.
"El cáncer volvió. He sobrevivido a tres cirugías, a 11 sesiones de quimioterapia y aún me faltan 13 más, pero no me voy a detener. Les cuento esto para hacer conciencia de lo más importante que tenemos todos: la vida".
El ex diputado federal recordó que hubo voces que le pedían mantener su padecimiento en privado, pero no aceptó el consejo.
"La realidad es que tenemos la capacidad de vivir nuestra enfermedad con dignidad y amor, sin avergonzarnos por nuestro estado de salud ni tener miedo al qué dirán", expresó.
"Mi recomendación es totalmente distinta: muestren su cuerpo y su espíritu como son. Háganlo auténticamente sin cuidar las apariencias. Sepan que quienes los aman, lo harán, independientemente de su estado de salud".
Adame estuvo acompañado de su esposa Eli y sus hijos María, Rodrigo e Inés, así como por sus padres Marco Adame, ex Gobernador de Morelos, y Mayela.
Según explicó, su iniciativa pretende que haya un apoyo subsidiario para los familiares de quienes padezcan cáncer.
También presentó un punto de acuerdo para invertir más en los enfermos con cáncer el próximo año, a propósito de la discusión que se está teniendo por el Presupuesto de Egresos de la Federación.
"¿Qué viene en el futuro? No lo sé. Dios se reiría de mí si vuelvo a hacer planes. Sin embargo, lo que sí me he esforzado en contestar es la pregunta clave que se ha desprendido de toda esta experiencia: ¿Para qué sigo aquí? En mi ignorancia sobre el futuro, sé que estoy aquí para amar más al prójimo, para hacer el mayor bien posible cada día de mi vida", manifestó.