La zona costa de Baja California carece de seguridad hídrica para este 2022, debido a que no se tienen asegurados el 20 por ciento total de lo que se consume en un año en Tijuana y Playas de Rosarito, municipios más poblados y con más turismo.
Ese 20 por ciento es equivalente a 32.5 millones de metros cúbicos (Mm3) de agua para uso urbano, alertó la Gerencia del Distrito de Riego del Río Colorado.
De los 160 millones de metros cúbicos de agua que consumen cada año Tijuana y Playas de Rosarito, solo tienen asegurados 80 Mm3 que se conducen desde el acuífero de la Mesa Arenosa, en San Luis Río Colorado, Sonora, hasta el noroeste de Baja California.
Gerardo García Saille, gerente del Distrito de Riego Río Colorado, aseguró que esta situación, aunado a las nuevas condiciones de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) por sequías y recortes anunciados por parte de Estados Unidos en el tratado por el Río Colorado, se prevé que haya un recorte también para el 2023.
“Ellos (Gobierno de Baja California) están apurados porque no hay un convenio, porque había un convenio por los 17.5 que ya se les entregaron y no hay un convenio para los volúmenes adicionales, porque no se han puesto a disposición volúmenes adicionales (entre los productores), estamos en esa encrucijada”, apuntó.
Bajan presas su nivelGarcía Saille explicó que la Presa El Carrizo, localizada en Tecate, bajó de nivel cuando se cortó el servicio de energía del Acueducto del Río Colorado en la administración de Jaime Bonilla, y no han podido recuperar mayor volumen de agua.
Una de las renuencias que tienen los productores del campo para vender agua a la zona costa de Baja California este año, explicó el gerente, es que el Gobierno del Estado no paga a tiempo el agua a los productores.