El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy instó el viernes a los aliados occidentales a acelerar su apoyo militar a Ucrania y advirtió en una importante conferencia sobre seguridad internacional que los retrasos favorecerían a Rusia cuando la invasión se acerca a su primer aniversario.
“No hay alternativa a la celeridad, porque de la celeridad depende la vida”, dijo Zelenskyy en la Conferencia de Seguridad de Múnich en Alemania.
Ucrania depende de las armas de Occidente para frustrar la ambición del presidente ruso Vladimir Putin de asegurar el control de grandes áreas del país, en lo que se ha convertido en una prueba de la determinación de los gobiernos extranjeros en medio de los crecientes costos financieros.
Unos 40 jefes de Estado y de gobierno, además de políticos y expertos en seguridad de casi un centenar de países, incluyendo Estados Unidos, Europa y China, estarán presentes en la reunión de tres días.
En su petición de más armas occidentales, Zelenskyy comparó la lucha de Ucrania contra la invasión rusa con la pelea bíblica entre David y Goliat y dijo que su país tenía el valor de David, pero necesitaba ayuda para obtener la honda.
Zelenskyy prometió que su país finalmente prevalecerá sobre la agresión de Moscú, pero advirtió que Rusia “todavía puede acabar con muchas vidas”.
“Es por eso que debemos darnos prisa”, dijo Zelenskyy. “Necesitamos velocidad”.
Zelenskyy presenta a Ucrania como defensora de los valores occidentales de libertad y democracia frente a la tiranía y alega que su nación tiene que estar bien aprovisionada para defenderse de Rusia. Los países occidentales le han brindado su apoyo, pero a veces han demorado en satisfacer sus pedidos.
El canciller alemán Olaf Scholz, que ha sido uno de los principales partidarios de Ucrania, aunque a veces vacilante, renovó las promesas de ayuda, pero insistió en que los aliados de Kiev no deben apresurarse.
“Pese a toda la presión para actuar que sin duda existe, en esta cuestión decisiva debe priorizarse el cuidado sobre las prisas, la cohesión sobre las medidas en solitario”, subrayó Scholz, cuya prudencia sobre Ucrania ha sido notable.
El mes pasado, Berlín acordó entregar tanques de guerra Leopard de fabricación alemana a Ucrania y otorgar a otros países licencias para hacer lo mismo. Las autoridades alemanas, que enfrentaron una fuerte presión para dar ese paso, se han dicho desde entonces decepcionadas de que otros países no hayan aportado más.