La versión de coronavirus que se ha vuelto la más dominante en Estados Unidos pertenece a la familia ómicron, pero los científicos aseguran que se propaga más rápido que sus predecesoras, es capaz de eludir a la inmunidad y posiblemente puede causar un cuadro más grave.
¿Por qué? Porque combina propiedades tanto de ómicron como de delta, la mutación más dominante en el país a mediados del año pasado.